Columna Empresas del Siglo XXI: Invertir constantemente en el liderazgo es una necesidad

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Las empresas siguen enfrentándose a una necesidad continua de nuevos y mejores líderes. Y es que en un mundo donde el conocimiento se duplica cada año y las habilidades tienen una vida útil media de 2,5 a 5 años, los líderes necesitan un constante desarrollo.

Esa necesidad es impulsada no solo por las expectativas de cambio de la fuerza laboral sino también por dos temas subyacentes de vital importancia: la globalización y la velocidad y extensión del cambio tecnológico.

Según el más reciente estudio sobre tendencias de capital humano y liderazgo, realizado por Deloitte a nivel mundial, entre 3.300 empresarios en 106 países, la brecha de liderazgo está creciendo con implicaciones masivas en el desempeño a largo plazo.

Todo indica que se está fallando en preparar nuevos líderes al no hacer las inversiones adecuadas en su desarrollo y, mientras la brecha de liderazgo siga creciendo, se pone en riesgo la capacidad de mantener la organización competitiva a futuro.

Las empresas deben entender que el desarrollo de liderazgo no es un problema de corto plazo y deben invertir en programas que no solo brinden oportunidades de aprendizaje en aulas y en línea, sino también, deben construir una cultura de liderazgo que inspire a los empleados a convertirse en colaboradores activos para el éxito de la compañía.

Algunas recomendaciones que se derivan del estudio son: a) compromiso con programas de desarrollo de liderazgo desde la “cabeza” de la organización; b) desarrollar líderes inclusivos a todo nivel de la organización; c) hacer de los planes de desarrollo y sucesión, una prioridad; d) crear metodologías y marcos de mando para poder generar planes coaching , desarrollo y poder medir dichos planes; y e) hacer un programa permanente y no un evento aislado.