¿Ha pensado alguna vez de qué forma su negocio puede ir más allá de generar ingresos y tener un impacto mucho más positivo en la sociedad?

Si esa es una de sus preocupaciones, quizás sea un buen momento para abrirle las puertas a la responsabilidad social.

Esta puede ser ejercida por todos los negocios, incluidos los micro, pequeños y medianos. Cuando hablamos de responsabilidad social, ¿a qué nos referimos exactamente?

La norma ISO 26.000, que se encarga de brindar una guía sobre este tema, la define como la “responsabilidad de una organización ante los impactos que sus decisiones y actividades ocasionan en la sociedad y el medio ambiente, a través de un comportamiento transparente y ético que contribuya al desarrollo sostenible, la salud y el bienestar de la sociedad”.

Además, dicha norma indica que, para ser responsables, las empresas u organizaciones tienen que valorar otros aspectos, como los siguientes:

  • No se confunda

    Los expertos en esta temática aclaran que la responsabilidad social no debe confundirse con ser caritativo o altruista.

    Por ejemplo, donar ropa y comida a personas en necesidad es una práctica noble y positiva. No obstante, si no viene acompañada de una estrategia integral ─como lo plantea la responsabilidad social─ se considera una acción aislada.

    Por otro lado, sería contradictorio que su empresa brinde regalos y dinero a comunidades y pretenda ser responsable socialmente, pero que no les pague el aguinaldo a sus trabajadores o que contamine el río de la comunidad con sus actividades productivas.

    La responsabilidad social implica cumplir con la ley y dar pasos adicionales para contribuir con el entorno social.

    Algunas ventajas que le traerá actuar con responsabilidad social:

    Reputación

    Crea una buena reputación

    Confianza

    Aumenta la confianza de los clientes

    Satisfacción

    Genera mayor satisfacción en los empleados

    Oportunidades

    Abre oportunidades de negocio

    Mercado

    Posibilita exportar a mercados más exigentes

    Talento

    Permite retener talento

    Lealtad

    Crea lealtad entre los trabajadores

    Competitividad

    Mejora la competitividad

    Costos

    Reduce costos

    Lazos

    Se estrechan lazos con la comunidad

    Impacto

    Genera un impacto social, económico y ambiental positivo



    Fuentes: Olga Sauma, directora ejecutiva de la Alianza Empresarial para el Desarrollo y Daira Gómez, directora ejecutiva de Cegesti.

    Paso a paso

    ¿Cómo empezar?

    Al momento de decidir poner en práctica la responsabilidad social en su pyme, quizás no tenga mucha luz sobre qué exactamente hacer y cómo empezar. Seguidamente, puede encontrar el paso a paso para crear una estrategia en esta materia.

  • 1. Evalúese

    Revise si su negocio está incumpliendo con alguna legislación y póngase en regla, pues no se puede hablar de responsabilidad social si se viola la ley.

    A lo interno de su empresa, es preciso analizar en qué áreas está fallando.

    Puede que la empresa vaya en la dirección correcta y solo hay que reestructurar algunos elementos.

  • 2. Cree un equipo de responsabilidad social

    Para definir su estrategia de responsabilidad social, es fundamental involucrar a todos los trabajadores de la empresa y que no sean políticas unilaterales que provienen desde la gerencia. No se trata de imponer una visión, sino de construirla entre todos.

  • 3. Fije un propósito superior por el cual trabajar

    Una vez que la empresa se examinó y que cuenta con un equipo de trabajo, quizás conviene revisar la misión y visión de esta, que podrían estar desfasadas a raíz de sus nuevos planes.

  • 4. Establezca prioridades y cómo ejecutarlas

    Se debe definir una política que contemple qué asuntos abordar, cómo alcanzar las metas y determinar de cuántos recursos económicos se dispone para ejecutar los objetivos trazados.

    Puede empezar por lo interno y mejorar sus políticas hacia sus trabajadores, por ejemplo, y añadir otros proyectos.

    Gestione alianzas con otras instituciones y empresas, con el fin de generar un impacto más fuerte y además ahorrar recursos económicos, pues lamentablemente no siempre se tiene el dinero para ejecutar todos los proyectos.

  • 5. Evalúese periódicamente y efectúe correcciones

    Su estrategia no tiene que permanecer estática. Lo ideal es realizar evaluaciones cada cierto tiempo.

    Si se determina que algo no está dando el resultado esperado, es menester realizar los cambios requeridos para alcanzar las metas fijadas.

  • Fuentes: Eduardo Villafranca, presidente de Grupo RBA; Daira Gómez, directora ejecutiva de Cegesti; y Olga Sauma, directora ejecutiva de la Alianza Empresarial para el Desarrollo.

    Abanico de opciones

    Áreas en las que puede trabajar su pyme

    Escoja los temas con los que más se identifique su negocio.

    Imagine que su pyme se dedica a producir y vender yogur saludable (con poco azúcar y que utiliza ingredientes naturales), pues una de sus preocupaciones como dueño de la empresa es que las personas se alimenten mejor.

    Recientemente, su empresa decidió evaluarse y empezar a investigar sobre la responsabilidad social, pues quiere aplicarla.

    Dado que la pasión de su negocio es la alimentación saludable, sus políticas de responsabilidad social podrían versar sobre ese asunto.

    ¿Qué estrategia de responsabilidad social podría forjarse?

    Promover una serie de medidas para que sus empleados se alimenten mejor y que se preocupen por ejercitarse: brindarles información; impartir charlas; organizar actividades deportivas; si hubiese una soda en la empresa, vender desayunos y almuerzos saludables, entre otras. En cuanto a acciones externas, podría igualmente promover la alimentación saludable entre las personas que integran la comunidad en la que está la empresa o patrocinar a atletas, por citar algunos ejemplos. El hecho es que cada pyme deberá puntualizar qué temas son más afines a esta, con el apoyo de sus grupos de interés. Estos son algunos ejemplos de los campos en los que se puede actuar:

    Promover el manejo adecuado de desechos (reutilizar, reciclar), usar insumos menos contaminantes, comprarle a proveedores que gestionan correctamente sus desechos, instalar dispositivos que ahorren agua y electricidad y que se genere así una mayor eficiencia energética.

    Crear líneas de productos y servicios que sean beneficiosos para la salud de los consumidores. Promover estilos de vida saludable dentro y fuera del negocio.

    Crear condiciones dentro de la empresa que favorezcan a los empleados, como ofrecer salarios más competitivos o lo que se conoce como salarios emocionales (otorgar ciertos permisos y ser más flexible, brindar la opción de teletrabajo, ofrecer capacitación), generar estrategias sólidas para evitar la discriminación a lo interno, educar en temas de género.

    Se pueden planear actividades que contribuyan con la comunidad en la que está la empresa o con otros sitios, como sembrar árboles, recoger basura, impartir charlas y tutorías. Aquí es esencial tomar en cuenta la opinión de los miembros de las localidades para descubrir cuáles son sus necesidades principales.

    Puede dedicarse a rescatar el valor de la cultura dentro de la sociedad (música, arte, cine, teatro, tradiciones populares, entre otros), organizar este tipo de actividades o respaldar a artistas u organizaciones orientadas a ello.

    Puede promover causas como la prevención de la discriminación de todo tipo (por género, orientación sexual, edad, religión y otras), defender los derechos de los niños, de los indígenas, de las mujeres, de las personas con discapacidad, entre otros grupos. Para lograrlo, puede aliarse con organizaciones que se dediquen a alguno de esos asuntos.


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