Black Friday: siete buscadores de ofertas comparten sus experiencias

Un grupo de compradores nos cuentan cómo se las ingenian para ir tras las promociones de esta fecha que en muchos casos se inicia hoy, jueves, y en otros culmina el fin de semana

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Hace un año, Karlina Herrera estaba dándole vueltas a la idea de comprarse una tableta Samsung Galaxy Tab 2. Tras comparar precios, decidió esperar a las promociones del ‘viernes negro’, esas de las que todo el mundo habla, su paciencia fue recompensada cuando encontró el teléfono en descuento, ahorrándose unos ¢170.000.

Al igual que ella, cientos de costarricenses aprovechan los descuentos del ‘viernes negro’ para adquirir esos productos que, en algún momento del año, parecieron decirles: ¡cómprame, cómprame!

Lo bueno de esta fecha comercial es que casi todos los artículos están en promoción; desde los gadgets para el nuevo iPhone 6 hasta la ropa de marca y los juguetes que traerá Santa en Navidad.

Los ticos conocen bien esa mecánica y hacen hasta lo imposible por conseguir los mejores descuentos. No importa que eso signifique viajar a Estados Unidos, pasar horas navegando en Internet o sacar el día de vacaciones para ir de tienda en tienda.

Cazadores de ofertas

Aunque el ‘viernes negro’ surgió en Estados Unidos, los comercios nacionales decidieron adoptar esa fecha ofreciendo importantes descuentos en su mercadería.Dicha estrategia logró atrapar la atención de consumidores como Marta Vargas, una treintañera que acostumbra obtener vacaciones durante ese día para sacarle mayor provecho en las ofertas.

El año pasado, por ejemplo, dedicó toda la mañana a visitar jugueterías, zapaterías y tiendas por departamento para adelantar las compras de Navidad.

Irene Wong es otra que acude a las tiendas nacionales para hacer sus compras en ‘viernes negro’.

Ella tiene su estrategia bien definida. Llega muy temprano al centro comercial y busca productos que tengan rebajas del 50%.

En los últimos dos años compró una ‘compu’ Sony y ropa interior para toda la familia de la marca Calvin Klein. Todos esos artículos le salieron a mitad de precio.

Todo por Internet

Hay otras personas que prefieren sacarle el jugo a los descuentos en línea.

Rodolfo Fernández es todo un experto en esa materia. Tiene seis años comprando en ‘viernes negro’ motivado por la publicidad que se ve en la web.

Desde entonces, ha comprado pantallas de televisión, consolas, videojuegos, artículos de belleza, ropa, zapatos y juguetes. Si hay algo que destacan los aficionados a las compras en línea es que en esta época se consiguen descuentos importantes.

Esteban Casasola asegura que la ganga más grande que compró fue una pantalla Led HD de 40 pulgadas en combo con una consola PlayStation 3, todo por $400 (unos ¢216.000). El precio regular era de $700 (unos ¢378.000).

Una experiencia similar vivió Laura Salazar, vecina de Santo Domingo de Heredia. El año pasado compró un edredón en la tienda Ebay.

Inicialmente, el artículo valía $399 (unos ¢215.000) y le costó al final en $39 (unos ¢21.000).

Viajes frecuentes

Algunos ticos acostumbran ir a Estados Unidos para hacer compras durante el ‘viernes negro’.

Es una práctica tan popular en el país, que algunas agencias de viajes nacionales organizan tours especiales para esta fecha.

Gabriela Fernández tiene unos 10 años de ir a Estados Unidos para aprovechar los descuentos propios de la época. Su interés principal es comprar ropa.

Una vez, por ejemplo, adquirió pijamas para niños en tan solo $4 (unos ¢2.000). Aunque los descuentos son importantes, esta desamparadeña asegura que no todo es color de rosa.

“Viajar en esta fecha es sumamente cansado ya que implica prácticamente no dormir, pues los comercios no cierran”, recuerda Fernández.