Chiquita Brands retoma olimpiadas bananeras para mejorar prácticas productivas

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Después de 10 años de no realizar las llamadas Olimpiadas Bananeras, la compañía transnacional Chiquita Brands retomó este año la actividad con miras a generar una cultura de mejores prácticas en sus trabajadores de Centroamérica y Ecuador.

Este 29 y 30 de julio, las olimpíadas reunen a más de 200 personas, entre trabajadores y comunidades vecinas, para identificar aspectos críticos del negocio bananero como la motivación del personal, el fortalecimiento de los equipos, la eficiencia de los procesos, la reducción de costos y la ejecución de la actividad bajo criterio de respeto al medio ambiente y a la comunidad.

Las olimpíadas se realizan en Siquirres, Limón específicamente en la Finca Trópico de Cobal, una subsidiario de Chiquita en Costa Rica y participan trabajadores de los seis países donde la firma tiene presencia regional: Guatemala, Honduras, Panamá, Nicaragua, Costa Rica y Ecuador.

Se trata de una actividad que inició meses atrás cuando las áreas administrativas y de campo de la empresa realizaron eliminatorias para elegir al equipo representante de cada país, tanto en el caso de fincas propias de la compañía como donde opera con proveedores independientes como es el caso de Ecuador y Nicaragua.

Cada país envió a 10 delegados entre los cuales están aquellos dedicados a labores de campo, personal administrativo y grupos de apoyo. Las olimpíadas consisten en que, de manera simultánea y en igualdad de condiciones, se hagan labores agrícolas en áreas designadas de la finca. Hay un jurado compuesto por supervisores y técnicos quienes evalúan la eficiencia del proceso, rendimiento, calidad, estado de la fruta y el uso correcto del equipo de seguridad personal. Como observadores están ejecutivos de la alta gerencia regional y de la casa matriz, ubicada en Charlotte, Carolina del Norte. También está presente el CEO Ed Lonergan y el Oficial de Responsabilidad Corporativa, Manuel Rodríguez.

La actividad reune además a representantes locales de la Unión Costarricense de Cámaras, la Organización Internacional del Trabajo, el Ministerio de Trabajo, el Movimiento Solidarista Costarricense, la Corporación Bananera Nacional y la Cámara Nacional de Bananeros.

Al jurado también le corresponde calificar cómo se desarrollar labores como el deshije, la protección de la fruta, cosecha y el proceso de empaque. La idea es determinar cuál equipo competidor logra obtener el banano con el mejor grosor, con el grado de maduración adecuado y con los niveles óptimos de longitud y apariencia.

De acuerdo con información suministrada por la compañía, el propósito de estas competencias es motivar al personal a compartir sus destrezas y conocimientos; de reconocer el talento. Finalmente, es a través de este proceso productivo que Chiquita logre exportar millones de cajas de banano al mundo.

"Aquí todos llegan como ganadores, ya que durante las eliminatorias locales, las fincas escogieron a sus trabajadores más sobresalientes. Esto es único en la industria bananera, ya que es un espacio de convivencia y para muchos es la primera vez que salen de su país", explicó Marco La Touche, gerente de relaciones laborales de Cobal.

Tras 10 años de no realizarse estas olimpiadas, esta ocasión dio pie para incorporar dos nuevos temas: el de Meta Cero para demostrar cómo se puede hacer un trabajo eliminando riesgos y accidentes, y el de Ideas Innovadoras que pretende mostrar cómo se puede impactar positivamente el negocio mediante mayor eficiencia de los procesos y cómo ser más sostenible.