Columna Clase Ejecutiva: Yo no olvido el año viejo…

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Cada 31 de diciembre, millones de personas de México, Centroamérica, Colombia y Venezuela se despiden y reciben el nuevo año al son de la canción “El año viejo” . Esta fue compuesta por el compositor colombiano Crescencio Salcedo, pero se volvió famosa con la grabación de Tony Camargo, cantante mexicano, que la escuchó por casualidad.

Historias sorprendentes acompañan también a algunos de los famosos villancicos que inundan nuestro espacio sonoro durante diciembre. “El tamborilero” –villancico de origen checo– adquirió popularidad en su versión inglesa gracias a que fue grabada por la Familia Trapp, que a su vez fue inmortalizada en la película La Novicia Rebelde . Noche de paz fue compuesta en un pequeño pueblo de Austria en 1818. Su rastro se perdió por algunos años, sin embargo, se sabe que en la tregua de Navidad de la Primera Guerra Mundial –en 1914–, fue cantada por los soldados de ambos frentes, pues era la única que se sabían. Actualmente se canta en más de 300 idiomas. “Adestes Fideles” , fue probablemente compuesta por el rey Juan IV de Portugal, llamado “el rey músico”, a mediados del siglo XVII. Ya durante el siglo XVIII se empezó a cantar en Inglaterra, Francia y España. Otros villancicos con orígenes antiguos son “Joy to the World” , compuesto en Inglaterra en 1719, sobre una melodía del famoso compositor Händel y Campana sobre campana, de origen popular andaluz. Pero quizás uno de los más antiguos es el llamado “Good King Wenceslas” , compuesto sobre una melodía del siglo XIII.

Algunos villancicos norteamericanos saltaron a la fama cuando se incluyeron en filmes o fueron grabados por cantantes como Frank Sinatra y Bing Crosby, por ejemplo, quienes grabaron versiones de “Jingle bells” ; Ella Fitzgerald grabó “Let it snow” y Dean Martin tiene una versión de “Rudolph the red nosed reindeer” .

En Costa Rica, los villancicos de Brunilda de Portilla recuerdan tradiciones navideñas: el olor del ciprés se mezcla con el del cohombro y los tamales, en canciones llenas de alegría y esperanza.