Emprendedores planean fabricar vehículos eléctricos en Costa Rica

Dos proyectos de vehículos eléctricos esperan conseguir financiamiento para iniciar producción local

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En el corto o mediano plazo, los vehículos eléctricos podrían aparecer a la par de la piña, el café y los chips para computadora en la lista de exportaciones que realiza Costa Rica.

Una empresa costarricense diseñó un automóvil híbrido con el objetivo de producirlo aquí para el mercado local y para exportar a Centroamérica.

Paralelamente, un equipo de exalumnos del Tecnológico de Costa Rica (TEC) diseñó un modelo eléctrico, compacto y con tres llantas, con capacidad para dos personas de pie, que puede ser utilizado por la policía para sus rondas.

Ambos proyectos están a la espera de encontrar los fondos o toparse con algún inversionista que considere viable sus proyectos.

Además, para mejorar la competitividad de esta futura industria, se requieren ciertos aportes por parte del Gobierno.

“Lo difícil es la actitud de tercer mundo que todo tiene que venir de afuera. Un señor me indicó que le dijera, sinceramente, a quién vamos a traer para hacer los carros. Ese quién soy yo”, opinó Jesse Blenn, uno de los socios de Asesorías para el Desarrollo S. A., impulsores del vehículo eléctrico llamado CambYo CR.

Si se logran finiquitar algunas cuestiones logísticas de costos, el inicio de una industria de automóviles eléctricos en el país puede ser una realidad, ya que a estos dos proyectos se suman los deseos de Sergio Gutiérrez, gerente de Electroautos S. A, distribuidores de Reva en Costa Rica.

Gutiérrez comentó que la empresa ha tenido la idea de ensamblar en el país los automóviles Reva, pero el principal problema es que para hacer rentable el negocio debe pensarse a nivel centroamericano y, además, tener apoyo en cuanto a incentivos fiscales del Gobierno.

Jesús Castro, gerente general de Grupo Purdy Motor, consideró que en el país existe una fuerza laboral con gran capacidad de mejorar procesos, proyectos e innovar en temas de vanguardia como las tecnologías limpias.

Sin embargo, consideró que la fabricación de un vehículo es un proceso muy elaborado y sofisticado, y podría ser complicado en el país, pero no imposible.

“En caso de que en Costa Rica se llegue a desarrollar no sólo el motor, sino todo el vehículo, se debe asegurar y proveer, ya sea la capacidad de producción de los muchos componentes del vehículo o las opciones arancelarias correspondientes para facilitar el ingreso de materiales”, añadió Castro.

Capital semilla

Asesorías para el Desarrollo S.A requiere de ¢65 millones para iniciar la producción de CambYo CR, monto que incluye hacer dos prototipos y convertir el actual local que tienen en Pérez Zeledón en un taller equipado.

Lograron el primer lugar en la competencia de Planes de Negocio en la Universidad Nacional (UNA) de Pérez Zeledón y esperan ganar el primer puesto a nivel nacional. También son finalistas en la competencia de financiamiento del Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD).

“Si logramos ese financiamiento, estamos en producción”, afirmó Blenn.

El equipo de egresados del TEC también están a la espera de su inversor, informó Daniel Berdugo.

Han ganado tres concursos de emprendedores y actualmente son finalistas en el Desafío Intel L Latinoamérica.

Berdugo prefirió no dar a conocer aún más detalles del proyecto.

Trabas logísticas

Además de inversionistas, iniciar esta industria requiere de apoyo por parte del Gobierno en cuestiones tan simples como dar información.

Blenn demoró más de un año averiguando cómo podía poner a circular a CambYo CR por las calles de Costa Rica una vez que fuera construido.

Para circular, necesita estar inscrito en el Registro Nacional, donde le piden la Declaración Única de Aduanas (DUA), documento que no tendría este modelo porque no pasó por aduanas al ser hecho en el país.

Tras consultar a unas diez entidades como los ministerios de Hacienda, de Economía, de Ambiente y de Comercio Exterior, ninguno le supo indicar cómo obtener el DUA o sustituirlo por otro papel similar.

Hace pocos meses, Blenn logró contactar a la empresa de buses Daewoo, quienes ensamblan varios de sus modelos en el país.

Ellos lo pusieron en contacto con el agente que inscribe sus buses ante el Registro.

Finalmente, el trámite era sencillo, pues estas personas contactaron a la aduana para que hicieran una inspección del vehículo y estimaran sus costos de producción. Con eso bastó para confeccionar la DUA.

Otro punto pediente por afinar es el esquema de costos, pues del valor que define la aduana, la empresa paga un 10% de impuestos cuando el vehículo es híbrido y 0% cuando es eléctrico, pero no se contemplan los impuestos que se pagaron en los componentes comprados localmente.

Por ejemplo, si compran las rótulas o los asientos en el país, ellos deben asumir el pago del 43% de impuesto que debe cobrarles su proveedor, mientras compiten con carros eléctricos de otros países que pagaron 0% de impuesto en los mismos componentes.

Negocio rentable

Pese a las trabas, las estimaciones demuestran que CambYo CR es rentable.

Este modelo será fabricado con tecnología de aviación, es híbrido y enchufable, con un motor auxiliar para generar la energía que consume.

Con solo la carga de la batería, puede circular unos 40 km y si se suma el tanque de combustible, puede alcanzar los 120 km.

Algunos componentes como los frenos, el motor y la caja de cambios deberán importarse al inicio, pero la meta es hacer alianzas locales para comprar aquí.

La carrocería sí puede fabricarse por completo en Costa Rica.

Tras cursar el módulo para emprendedores que imparte la UNA, los cálculos indican que necesitan vender dos automóviles al mes para mantener el negocio; si venden tres hay ganancia.

Después de un periodo de incubación de 12 a 15 meses pueden iniciar la producción con unos cinco trabajadores, ensamblando un ejemplar cada semana.

En el futuro, y con los materiales y componentes listos, con 16 trabajadores pueden ensamblar un automóvil en hora y media, saliendo uno cada 20 minutos.

A ese ritmo la meta es tener el 3% de las ventas país de automóviles nuevos.

Cada ejemplar costará entre ¢8 millones y ¢9 millones.

Debido a los materiales con los que se fabricará la carrocería (madera de balsa y aluminio delgado), la empresa no requiere de maquinaria pesada para formar los paneles.

“Podemos fabricarlo en cualquier escala, esa es la clave para el éxito”, añadió Blenn.

CambYo CR

Algunas de las características de este prototipo.

Característica

Detalle

Estilo

2 puertas

Capacidad

3 adultos

Dimensiones

2,85 m x 1,5 m

Velocidad máxima

90 kp/h

Frenos

De disco

Batería

Litio

Tiempo de carga al 80%

5 horas

Motor de gasolina

Subaru Robin

Fuerza del motor

7 caballos