Empresa de Grupo Britt detuvo su arribo a Asia por preferir el mercado americano

Morpho Travel Retail apuesta por ampliar su huella en América, especialmente en México y Colombia

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Quienes lideran Morpho Travel Retail, empresa subsidiaria de Grupo Britt, reconocieron a inicios del 2019 que existía una gran oportunidad de hacer negocios en el mercado asiático. Sin embargo, no dieron ese paso.

La compañía prefirió ampliar su presencia en América, continente en el que concentra la mayoría de sus tiendas (más de 160) y en el que cosecha buenas cifras a pesar de la inestabilidad generada por varios conflictos sociopolíticos.

Bajo esa visión, Morpho dio a conocer en diciembre pasado que invirtió $4 millones en la adquisición de una cadena de 23 tiendas en hoteles y aeropuertos ubicados en una de las zonas turísticas más importantes de México: la Riviera Maya.

México es uno de los dos mercados latinoamericanos en los que la empresa ve mayor potencial de crecimiento, según explicó Adriana Echandi, CEO de Morpho Travel Retail, a EF días después de anunciar la compra.

La subsidiaria de Grupo Britt cuenta con 1.790 colaboradores distribuidos en 11 países donde operan tiendas bajo marcas como Britt Shop, Casa Tica, Travel Market, Plug In, Whoops, Travel Zone, Rumbo Sur, Emeraldme y Jewelryme.

–¿Qué ocurrió con los planes de arribar a un nuevo continente?

–A principios del 2019 hicimos un proceso de estrategia para entender hacia dónde íbamos porque en algún momento habíamos pensado explorar el sur de Asia, como Tailandia, que es un mercado que se está desarrollando y que no hay un modelo como el nuestro. Sin embargo, movernos a otro continente implica ciertos riesgos.

Entonces ahora hay tres ramas de crecimiento. Una es sense of place (la marca es “local” en cada país que establezca operaciones) que es lo que hemos hecho y en lo que hemos crecido. La otra rama es manejar tiendas de otros conceptos y lo hemos hecho; crecimos mucho en alimentos y bebidas y tenemos otros conceptos como joyerías, boutiques, de tecnología y minimarkets.

La otra rama es crecer fuera de aeropuertos, hoteles y atracciones donde hemos crecido sobre todo en Costa Rica, donde tenemos un footprint muy fuerte, más que todo en la parte turística de Guanacaste.

Dado que eso es lo que tenemos, dijimos que nos enfocaríamos en Latinoamérica y en crecer en alimentos y bebidas, así como en hoteles y atracciones. Decidimos no salirnos de Latinoamérica porque no podemos crecer en los tres lugares (América, Nueva Caledonia –donde tienen una tienda– y otros) con los mismos recursos tanto financieros como de personas.

¿En cuáles países se van a concentrar?

–Decidimos que hay un mercado muy fuerte en México y Colombia, que son países en los que ya estamos, pero que no tenemos una huella como nos gustaría.

Entonces empezamos por México y analizamos la Riviera Maya, Cancún, Cozumel y toda esa parte de Isla Mujeres, donde conocimos a una pareja que tenía tiendas y que hacían una conexión perfecta con las nuestras; empezamos conversaciones y la compramos en junio de este año (2019), fueron seis meses en ese proceso.

Son 24 tiendas en diferentes hoteles que incluye también Puerto Vallarta y Los Cabos, que son áreas grandes para crecer y que nos abre más oportunidades de crecimiento dentro de hoteles.

Muchas de las cadenas están sacando licitaciones globales, entonces si tienen 20 hoteles en la Riviera Maya, hacen el proceso de licitación para las tiendas de esos 20 hoteles porque quieren un solo operador que facilite el negocio, la relación y que genera porcentaje sobre la venta o monto garantizado.

Nuestro de negocio es de oportunidad por lo que hay que estar preparados cuando viene una construcción de un aeropuerto, una nueva terminal u operador, ahí es donde está la oportunidad.

En el aeropuerto de Antigua y Barbuda buscamos opciones para dar nuestro modelo de Bakery y en Curacao acabamos de abrir en tres hoteles nuevos y atracciones. Entonces sí, en países donde estamos consolidados están esas dos líneas de crecimiento: alimentos y bebidas, o en hoteles y atracciones.

Estamos por abrir un Bakery en Lima, el cual más bien se nos atrasó, pero estará en los primeros tres meses del 2020… Trabajamos fuerte con unas franquicias para ver si podemos ampliarnos en hamburguesas y en pizzas.

–¿Durante los primeros seis meses bajo su control como se comportó el nuevo negocio en México?

–Vamos creciendo a doble dígito solo con ciertas fortalezas que tenemos en la estructura nuestra. Hay un back office que se enchufa, que genera sinergias con los sistemas de bodegas, el sistema de ventas, la forma de comisiones, estructura de los horarios de los colaboradores y agregamos nuevas categorías como alimentos y bebidas, en donde no eran muy fuertes.

Por otro lado, manejaban muy bien anteojos, categoría de bronceadores o bloqueadores, sombreros… cosas que tal vez nosotros no teníamos tanto porque nuestro enfoque era aeropuertos. Nos viene aportar a las tiendas que tenemos en hoteles en Costa Rica, por ejemplo.

–Ya dieron un paso en México, ¿qué viene para Colombia?

–El Aeropuerto Internacional El Dorado está colapsado otras vez, ellos hicieron remodelaciones y crecieron, pero ya volvieron otra vez a la saturación de los vuelos, sobre todo por el hub tan importante que es Avianca y toda la región de América del Sur.

Tienen varios planes de expansión, por lo que estamos trabajando de la mano con Opain –operador del aeropuerto– para buscar oportunidades de crecimiento. Definitivamente crecer en El Dorado es uno de nuestros focos y también en zonas turísticas interesantes como Cartagena y Medellín, que en algunas licitaciones no se ha dado la oportunidad de entrar, pero que estamos siempre en contacto para poder trabajar en esas zonas.

–Ustedes apuestan por Latinoamérica pese a los conflictos sociopolíticos recientes, ¿estos pueden afectar sus resultados o no?

–Si hay cierta incertidumbre sobre lo que pueda pasar en el 2020. Nosotros en Morpho dependemos mucho de América Latina; Costa Rica es fuerte, pero si metemos a Chile, Perú, México y Colombia, esos países hacen más que Costa Rica, por lo que estamos encima de todas las políticas que pasen para reaccionar a tiempo, si hay que contraer el gasto o buscar sinergias que permitan que el negocio siga siendo rentable.

En Chile, por ejemplo, proyectamos un decrecimiento en ventas para el 2020 y ajustándonos a ese decrecimiento. Estamos deseosos de que vengan oportunidades de licitar y de crecer más bien para 2021-2022.