Tanto el alcohol etílico como los licores destilados de Costa Rica han triplicado sus exportaciones durante los últimos cuatro años.
Los números positivos responden principalmente a inversiones hechas años atrás por las principales empresas del sector.
La mejora en la calidad y en la productividad les ha permitido a las compañías acentuar su presencia en Estados Unidos, pero principalmente incrementar los envíos a Europa.
Curiosamente, el sitio de indicadores Trading Economics –utilizado como referencia por la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope)– afirma que los precios internacionales del etanol (alcohol etílico) se redujeron 16,6% los últimos 12 meses.
Eso significa que el crecimiento de las exportaciones del producto tico se dieron a pesar de esa baja.
Las dos principales empresas productoras de alcohol son el Ingenio Taboga y Central Azucarera del Tempisque (Catsa), que abastecen a la Fábrica Nacional de Licores (Fanal) y exportan el resto, ya sea para uso médico o como base para generar otros licores.
Más caña, más alcohol
Durante los primeros nueve meses del 2013, se generaron $71 millones en divisas por exportación de alcohol etílico, según datos de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer). .
Adrián Guzmán, gerente general de Ingenio Taboga, detalló que entre las dos empresas se produjeron el año pasado unos 35.000 millones de litros, un número que ha venido creciendo desde la siembra 2010-2011 pero que posiblemente se estanque este año.
Para mediados del otro año, Guzmán estima que contarán con la misma cantidad de alcohol del periodo 2012-2013.
El crecimiento en Ingenio Taboga responde a que incrementaron el área de siembra de 8.000 hectáreas a 10.000 hectáreas en tres años. Esto los obligó a hacer inversiones para ampliar la fábrica y la capacidad de producción.
Otro factor que contribuye al aumento es que desde hace pocos años este ingenio está importando miel de Nicaragua, con la cual producen etanol y lo exportan a Europa para la fabricación de biocombustibles.
“El etanol que producimos tiene la suficiente calidad como para ingresar a Europa, pero aquí no se ha podido producir biocombustible”, comentó Guzmán.
Se trató de localizar al vocero de Central Azucarera del Tempisque (Catsa), pero no f ue posible.
Con sabor a ron
En licores destilados, el ron, el aguardiente y el whisky también han tenido números en crecimiento los últimos años.
Mientras que el ron y el aguardiente crecieron 2,5 veces en cuatro años, el whisky aumentó casi dos veces las divisas generadas, según información de Procomer.
Miguel Ángel Sánchez, gerente de Centenario Internacional, informó que, en el caso de esta empresa, en los últimos tres años sus envíos al exterior aumentaron en seis veces, principalmente por los logros obtenidos en el mercado europeo.
De toda la gama que producen, los que han tenido más aceptación son el Ron Centenario Clásico de 7, 9 y 12 años, así como la selección premium de Ron Centenario de 20, 25 y 30 años.
Al igual que el alcohol etílico, la mejora para Centenario Internacional responde a inversiones en su proceso productivo que incrementan la calidad final.
Son la única compañía productora de destilados en la región que cuenta con la Certificación de Calidad HACCP sobre seguridad alimentaria, otorgada por la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés).
Sánchez añadió que también han realizado fuertes inversiones en el desarrollo de la marca a nivel internacional.