¿Hacia dónde va Grupo Universal?

Empresa cerró imprenta y se concentra en crecer con megatiendas detallistas y nuevas marcas

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La decisión de los hermanos Roberto y Carlos Federspiel de separar las unidades de negocio del conocido Grupo Universal sirvió para definir la nueva estrategia de la marca insigne de la compañía, Tiendas Universal.

Recientemente, Roberto Federspiel Pinto, de 58 años, compró la participación de su hermano en la empresa Carlos Federspiel & Compañía –fundada por el abuelo de ambos hace casi 90 años– y quedó en control total de Universal, las tiendas Fuji Film y la Litografía e Imprenta Universal.

Por su parte, Carlos Federspiel, de 62 años, decidió adquirir, manejar y desarrollar de forma independiente el negocio de importación de vehículos que pertenecía al grupo: Autos Subarú.

La razón del cambio tiene que ver con un deseo de especializar el manejo de cada división.

A pesar de ello, los hermanos aún mantienen propiedades en común.

Ahora bien, ¿qué significó este cambio de mando para la operación de las tiendas?

Según el nuevo director general de Universal, Roberto Federspiel Murillo de 28 años, bajo el nuevo esquema la empresa ha podido dedicar mayor energía a su core business , es decir, el negocio retail, que representa el 90% de sus ingresos.

Esto incluye también manejar la nueva tienda de juguetes Lego, en Escazú.

Al corazón del negocio

Uno de los pasos para lograr ese reenfoque se dio con el cierre y venta de los equipos de la Litografía e Imprenta Universal, transacción que se concretó en los últimos 15 meses.

El 85% de la producción de esa compañía, ubicada en Avenida 6, en San José, era vendido a las tiendas del conglomerado.

Su cierre tiene sentido si se toma en cuenta que las 50 máquinas que la hacían funcionar requerían de un capital intensivo para mantenimiento y generaban un producto que es fácilmente importable de otras naciones.

De hecho, ahora los cuadernos son adquiridos en países como Brasil, Chile, Colombia y China, lo cual ha permitido redirigir los recursos humanos, de logística y financieros que acaparaba la imprenta hacia los planes de crecimiento de las tiendas.

Precisamente, la meta de expansión contempla operar unas 12 tiendas a partir del 2018.

Empero, no estará sola. La marca se enfrentará a agresivos planes de expansión de competidores que también ofrece juguetes y aparatos tecnológicos, como Grupo Simán –que quiere abrir seis tiendas al 2016–, Aliss, Carrión y Ekono.

Todas estas empresas, a excepción de Simán y Aliss, abrieron locales este año y algunas esperan crecer hasta en un 40% para el próximo año.

Entretanto, las cifras que aporta Universal hacen pensar que sus planes se basan en estimaciones sólidas.

El grupo cerrará el año con un incremento en ventas cercano al 20%, impulsado por la apertura de un punto en el mall Lincoln Plaza, en Moravia, y la ampliación de otro en Multicentro en Desamparados.

Así las cosas, el 2012 se convertirá en el primero, desde el 2008, en que la empresa alcanza un aumento de doble dígito.

“El consumo del costarricense es muy estable y se mantendrá similar al de este año. La meta de crecimiento para 2013 es más ‘agresiva’”, comentó el director.

¿Se modificó la estrategia?

El plan anterior de Universal era tener 14 tiendas para el 2010. Empero, la crisis económica del 2009 le bajó el tono a las expectativas.

Incluso, en algún momento, varias fuentes aseguraron que la empresa enfrentaba dificultades financieras.

Federspiel Murillo califica esos comentarios como rumores producto del proceso de separación de negocios que vivieron.

De hecho, según el director, cuando asumió su puesto hace dos años, encontró a una empresa sólida económicamente, razón por la cual no modificó mucho su estrategia.

Por ejemplo, el plan de abrir la tienda en Lincoln Plaza ya existía desde el 2007, pero no se concretaba por atrasos de la desarrolladora del centro comercial.

Lo que sí cambió fue la visión con respecto al tamaño de las tiendas. Antes, estas oscilaban entre 300 y 600 metros cuadrados, pero hoy el mínimo es 2.500 m². Ese es el caso del local de Desamparados, que incrementó su tamaño en un 50%.

Actualmente, de las ocho tiendas de la cadena, solo dos (Plaza Real Cariari y Liberia) no cumplen con ese estándar. La más reciente en Moravia mide unos 3.700 m².

Un mix de productos más amplio y el fortalecimiento de las categorías de mayor peso en ventas (juguetes y oficina se llevan el 50%) le dan sentido a tiendas de mayor formato.

Lo anterior también explica un plan de expansión más conservador en cuanto a número de locales. Máxime, al tomar en cuenta que, de acuerdo con Federspiel, una tienda de las características del punto de Lincoln Plaza requiere de una inversión de alrededor de $10 millones.

De esa cantidad, casi el 70% corresponde a la compra del inmueble.

No obstante, Universal está invirtiendo únicamente en la compra de inventario y gondolería para sus locales, lo cual le permite a contar con un mejor apalancamiento.

En el caso de Lincoln Plaza, el gasto en la compra del inmueble corrió por cuenta de Roberto Federspiel padre, pero no directamente de los recursos generados por Universal.

Más juguetes

En noviembre pasado, Universal abrió la primera tienda Lego del país y la más grande de Latinoamérica en un espacio de 220 m² en Avenida Escazú y una inversión de $500.000.

Además, contiguo a ese local creó un nuevo concepto de 80 m² llamado Learning Zoo, dedicado a la venta de artículos infantiles educativos.

Con el movimiento, Universal capitalizó dos de sus ventajas competitivas: la experiencia en la venta de juguetes y los derechos de distribución exclusiva de la marca Lego en Costa Rica.

Lego, segundo fabricante de juguetes en el mundo, decidió hace unos cuatro años crecer con sus propias tiendas, lo cual le ha significado un incremento del 25% en sus ingresos.

En la región ya cuenta con puntos en Perú, Chile, Brasil y pronto en Panamá.

Para Costa Rica, aún no hay planes concretos de expansión, pues Universal busca consolidar antes el concepto.

Sin embargo, la compañía sí tiene en mente nuevas aperturas y hasta más proyectos inmobiliarios en Avenida Central y Sabana.

Entretanto, Universal se mantiene a cargo de la representación de las tiendas Fuji Film en el país. El plan es fortalecer su línea de cámaras profesionales y semiprofesionales y crecer a la par de las tiendas de la compañía.

Los próximos años estarán cargados de planes para la casi centenaria compañía costarricense.

Lo que viene para Universal

Nuevas tiendas: En los próximos cinco u ocho años, la empresa proyecta manejar unos 12 locales de tamaños de entre 2.500 y 5.000 m².

City Mall: Su próximo local estará ubicado en el nuevo centro comercial alajuelense, que abrirá puertas en los primeros meses del 2014.

Avenida Central: Entre 2013 y 2014, los socios de Universal planean convertir el local de la tienda de la Avenida Central en el más grande del país, pues medirá mas de 5.200 metros cuadrados (30% más). El plan incluye remodelar el tercer piso y utilizarlo para la tienda y usar el cuarto como un food court para ocho restaurantes.

Torre Universal: No hay planes de cerrar la tienda de la empresa en La Sabana. Los socios se aliaron con la desarrolladora Pinmsa para crear un oficentro llamado Torre Universal, que estaría ubicado en el terreno de 7.000 m² donde hoy está el local comercial. Aún no hay fecha para el desarrollo.

Fuente Universal y Archivo EF.