Interbus, la compañía de transporte de turistas que explora nuevos negocios en movilidad y traslado de paquetes a raíz de la pandemia

Con ayuda de Caricaco, le ofrecieron ayuda económica al personal despedido

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Interbus es una compañía que depende un 100% del turismo y con las restricciones para intentar controlar el contagio de la COVID-19 sus ingresos cayeron a cero.

Esta empresa nació en 1996 cuando su fundador, Marco Occhi, identificó una oportunidad de ofrecer servicios de transporte colectivo a los turistas que venían a visitar Costa Rica.

La idea inicial se basó en los servicios que existían en Europa, tanto de buses como de trenes, que consisten en rutas definidas que le permiten a las personas viajar entre distintas ciudades a un precio razonable.

Esta compañía llegó a experimentar momentos de gran éxito al ofrecer más de 100 rutas diarias hacia los principales puntos turísticos del país.

Interbus cuenta con una flota de más de 40 vehículos.

Ahora las esperanzas de esta firma se centran en que el turismo internacional se reactive paulatinamente, pero mientras esto sucede, se prepararan en diversificar su línea de negocios relacionadas con la movilidad de personas y de productos.

Superar la crisis

La compañía tiene muy presente el 18 de marzo, día en el que se anunció el cierre de las fronteras del país.

A raíz de esta medida, Interbus entró en una fase de inactividad casi total.

Al depender en gran parte del turismo internacional, la compañía se enfrentó a días de muy poca demanda de sus servicios, razón por la cual tuvo que reducir el 80% de su personal.

“El personal fue liquidado y no puesto en suspensión de contrato. Creemos que merecen tener recursos económicos para subsistir durante la pandemia. Tenemos fe de poder contratar un porcentaje del personal una vez se reanude el turismo internacional”, afirmó Occhi.

Interbus es parte de la red de Caricaco, fundación mediante la cual la empresa pudo ayudar a todas las personas despedidas con el programa llamado Acelera, el cual ofrece transferencias económicas.

Este programa pretende darle un empujón a todos estos excolaboradores para que puedan pasar la pandemia con ciertos ingresos y eventualmente reinsertarse en el mercado laboral.

Actualmente, con la reapertura de fronteras, algunos servicios se han reactivado tímidamente como los traslados privados de punto a punto.

“Nos enfrentamos a varios meses con ingresos cercanos a $0 y eso nos ha generado una necesidad de ajustar nuestro modelo de negocio y propuesta de servicios”, relató Occhi.

Interbus ya recibió la contratación de su primer viaje después de la crisis sanitaria.

“Muchos de los turistas nacionales confían en viajar con nosotros porque les aseguramos protocolos de limpieza y certificados de la Cámara Costarricense de Salud que certifican la limpieza de nuestras unidades”, añadió Occhi.

Como parte de la estrategia de reactivación, la compañía se encuentra revisando su modelo de negocios, para implementar mejoras y poder ofrecer aún un mejor servicio a sus clientes cuando regresan a visitar Costa Rica.

Además, están desarrollando nuevas líneas de negocios que complementarán su propuesta actual e invirtiendo en su plataforma tecnológica.

Tres consejos

- ¿Cuáles son las lecciones más valiosas que aprendieron de la pandemia?

Es sumamente importante tener planes de contingencia y recursos financieros para enfrentar eventos inesperados y tener seguridad económica para los colaboradores y no dejarlos desamparados.

Es importante siempre estar preparados para hacerle frente a situaciones que podemos enfrentar y definitivamente lo que estamos viviendo nos está dejando grandes aprendizajes a todos.

- ¿Qué le podría recomendar a otros empresarios que están atravesando una situación similar a la de ustedes?

Es muy importante no tomar decisiones apresuradas, siempre analizar la situación que se está enfrentando y analizar los distintos escenarios posibles.

Una vez que se hace el análisis hay que tomar decisiones, aunque sean decisiones fuertes y complejas. Y lo más importante, hay que prepararse para lo que viene, no hay que quedarse paralizado. Hay que reinventarse y obligarse a evolucionar, ya que si uno entra en un estado de pánico luego comenzar de nuevo es más complicado.

Por último es buscar como proteger al personal, si bien hemos tenido que despedir a la mayoría nos aseguramos de pagarles el 100% y ayudarles con el programa Acelera.

Además que a pesar que llegamos a tener ingreso $0 por varios meses optamos por siempre mantener la empresa abierta y dejar el personal en puestos claves y prepararnos para estar más fuertes cuando todo vuelva un poco a la normalidad.

- ¿Consideran que el negocio volverá a ser el mismo cuando pase la pandemia?

En términos generales, el turismo no volverá a los niveles que vimos en el 2019 por muchos años.

Los viajeros están mucho más atentos a las buenas prácticas de las empresas y no pondrán por delante las tarifas económicas frente a la seguridad de salud, seguridad, eficiencia.

Las empresas que han tenido buenas prácticas en el pasado y han costeado las mismas, tanto antes como en el futuro, se verán beneficiadas contra las que solo especulan con precios baratos sin ofrecer calidad y seguridad a los pasajeros, confiando que nada podría ir mal.