¿Existe alguien que no reconozca el trago de la aceituna? La receta tradicional comienza enfriando una frágil copa de vidrio, mientras que en otro recipiente se combina una parte de vermouth y cuatro partes de gin, por no más de 10 segundos. Luego se desecha el hielo de la gélida copa, se vierte la mezcla y agrega una aceituna verde. Aparentemente simple de preparar, pero, según los más entendidos, extremadamente difícil de que quede perfecto.
Su origen es incierto y se especula que puede haber sido creado a fines del siglo XIX en el Hotel Savoy de Londres, en el Knickerbocker Club de Nueva York a comienzos del siglo pasado, o en el estado de California durante la Fiebre del Oro.
Preferido por inolvidables personajes, como el agente 007 –aunque con vodka en vez de gin, por un acuerdo económico entre Smirnoff y la Metro Goldwyn Mayer–; Don Draper, de Mad Men ; Carrie Bradshaw, de Sex & The City , y por otras incontables celebridades de carne y hueso del mundo del cine, la literatura y la política, como Carrie Grant, Bette Davis, Winston Churchill, Frank Sinatra, F. Scott Fitzgerald, Nikita Khrushchev, Ernest Hemingway y Franklin D. Roosevelt.
Simple, elegante y sensual, es hoy por lejos el aperitivo más solicitado y vendido del mundo.