Los empresarios agrupados en la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep) mostraron su preocupación acerca del nuevo proyecto que reforma el Código de Trabajo.
El texto fue presentado el lunes anterior por la fracción legislativa del oficialista Partido Acción Ciudadana (PAC) y los legisladores del Frente Amplio y la Unidad Social Cristiana.
"El sector empresarial se opone a la iniciativa, pues no solventa los motivos por los que fue vetado el proyecto original de reforma procesal laboral, es decir; permite las huelgas en servicios esenciales como salud y seguridad, entre otros, poniendo en riesgo a la población costarricense", afirmó la agremiación.
Según la Uccaep, la propuesta de estos tres partidos permite la convocatoria de huelgas con solo un 16% de los trabajadores totales de una empresa en la que no haya sindicato, lo que se convierte en un serio obstáculo a la seguridad jurídica de las compañías.
"Uccaep reconoce el derecho a huelga que tienen los trabajadores, pero considera que para que un paro sea legítimo se requiere el voto favorable de al menos el 50% de los trabajadores de la empresa", indicó.
La Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco) se unió a esta queja pues considera que puede afectar la competitividad y la inversión extranjera directa.
"El sector exportador no está en contra de la totalidad del Código Procesal Laboral, estamos en desacuerdo con exponer la seguridad que puedan enfrentar nuestros colaboradores en aspectos de salud por motivos de la paralización a las atenciones médicas, que pueden ser ocasionadas por un grupo pequeño de trabajadores, como actualmente lo está plasmado el nuevo proyecto de Ley, Expediente 19.306", señaló Laura Bonilla, presidenta de la Cámara, en un comunicado.
Alternativa de oposición
El miércoles, la fracción del Partido Liberación Nacional presentó una propuesta que valoraría el derecho de los trabajadores para hacer una huelga, pero incluye el derecho de los patronos frente a la huelga.
Esta propuesta cuenta con el apoyo de representantes del resto de fracciones dentro de la Asamblea Legislativa, según los diputados liberacionistas.
"Me parece que el proyecto que presentó el grupo de diputados cristianos, del Movimiento Libertario y don Óscar López, es un proyecto muy afín al del Partido Liberación Nacional y creo que allí podremos tener rápidamente una única propuesta, por lo que finalmente serían dos proyectos: el que presentaría este grupo y el que ya presentaron los diputados del PAC, el PUSC y el Frente Amplio" , dijo el diputado verdiblanco Antono Álvarez Desanti.
A inicios de su gestión el presidente Luis Guillermo Solís había prometido a la fracción del Frente Amplio que, de no aprobarse un proyecto sobre el tema procesal laboral de aquí diciembre, levantaría el veto interpuesto por la administración de la expresidenta Laura Chinchilla, con lo cual automáticamente se otorgaría la posibilidad de la huelga en servicios esenciales.