Una herramienta de equidad

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A través de diversos hechos históricos podemos comprobar que la mujer fue víctima del lastimoso concepto que aún en muchos ámbitos (no solamente por un asunto de género) no ha cambiado: la predeterminación.

Empero, el mercado ha demostrado que ningún individuo tiene un rol predeterminado en la sociedad, cada uno construye su vida según sus necesidades, expectativas y oportunidades.

Es así como a través de la empresa muchas mujeres han mejorados sus condiciones y conquistado lo que se merecen, una mayor equidad, especialmente en el comercio y ventas.

Las empresas familiares, las redes de mercadeo y las ventas por catálogo, han permitido a mujeres tener una mayor solvencia económica, incluso en algunos casos, siendo, al mismo tiempo, amas de casa. Pero estos casos son solo una pincelada de la gran apertura que la economía les ha brindado, lo que se une a una mayor independencia y a la opción de colaborar con el ingreso familiar.

Si profundizamos, podemos ver que muchas mujeres han optado por crear sus empresas a una mayor escala, eliminando cualquier tipo de discriminación laboral, siendo ellas su propio jefe, empleadoras y constituyendo también una alternativa para aquellas que tienen capacitación, pero están desempleadas: la de ser emprendedoras.

Se debe aprender a valorar y sacar provecho de las diferencias entre hombres y mujeres. Crear valor a través de la innovación es un punto fundamental para el éxito empresarial y la falta de creatividad femenina no es algo común. La creatividad nace de la necesidad de solucionar problemáticas, algo que las mujeres enfrentan a diario, pero la clave está en explotar ese potencial enfocado en algo que nos guste.

Muchos de los emprendimientos femeninos se dan en un marco de informalidad, debido a la limitación de recursos para iniciar un negocio y de hacer frente a la maraña de trámites y obstáculos para realizar actividades económicas, aún más en un país como Costa Rica, que se encuentra en la posición 118 para la apertura de negocios, del Doing Bussines 2015.

Sin embargo, eso no es todo, son las empresas las que han ayudado a las mujeres en zonas geográficas alejadas donde es más complicado que se promueva la inversión.

Asimismo, la tecnología también ha logrado romper con las barreras geográficas y ha contribuido a cerrar las brechas de género, dando la posibilidad a que la mujer trabaje desde el hogar, facilitando que las palpables consecuencias de criar a los niños o de administrar la casa tenga un menor peso en su decisión laboral.

La creación de empresa es una de las herramientas con las que la mujer cuenta cuando busca una mayor equidad, pues le da la oportunidad de ajustarse a los posibles cambios que enfrenta, cuando en algún momento de su vida decide ser madre o jefa de hogar.