Evite cinco errores a la hora de contratar personal

La entrevista no es la única posibilidad para identificar las aptitudes de un posible colaborador. Defina lo que busca y no se apure a la hora de seleccionar.

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Para empleadores como para colaboradores es un proceso delicado. Y es que los emprendedores temen contratar a la persona incorrecta. Y tienen razón: las malas contrataciones afectan la moral del equipo, pueden resultar caras y al mismo tiempo pueden causarle graves daños a una empresa.

Las contrataciones pésimas son fáciles y obvias. Pero muchas malas contrataciones no son tan obvias y resultan costosas. Existe un costo de oportunidad cuando se conserva a alguien en su empresa que no funciona y muchas ocasiones eso puede marcar la diferencia entre éxito y fracaso.

Para alertar a quienes en su negocio tienen la posiblidad de contratar personal, es que acudimos a la experiencia de Paula Leñero, Gerente de Consultoría de Deloitte, experta en temas de reclutamiento y a la de Laura Centeno Consultora Comercial de Manpower.

1. No apure el proceso de selección. El proceso debe ser ágil pero no apurado. Se debe dar seguimiento a todos los candidatos durante el plazo del reclutamiento especialmente cuando el proceso es largo, ya que si se demora mucho tiempo, algunos candidatos podrían desistir de la posición. Para realizar una buena selección se deben ejecutar no solo evaluaciones técnicas que demuestren el conocimiento y la experiencia en el puesto como tal, sino también ejecutar pruebas de psicometría y competencias para asegurar que cuenten con las habilidades apropiadas para la posición y que sus valores y personalidad sean acordes con la cultura organizacional de la empresa.

"Hay que visualizar al candidato interactuando con sus colegas, jefes o clientes no solo profesionalmente sino también socialmente. No se debe omitir una adecuada revisión de referencias laborales de sus trabajos anteriores con sus ex patronos (jefaturas inmediatas o el área de Talento Humano). Además se debe revisar sus atestados académicos para asegurarse que la información brindada en el currículo efectivamente sea correcta y verdadera", señala Centeno.

Algunas empresas utilizan las redes sociales para conocer más detalles de sus candidatos. Si no se realiza un apropiado proceso de reclutamiento, hay mayor posibilidad de contratar personas no aptas para un puesto y finalmente se incurre en un gasto de tiempo y dinero para ambas partes.

"En el proceso de selección, los entrevistadores pasan por alto información importante e interpretan erróneamente la información de los candidatos", comenta Leñero.

2. Contrate al mejor candidato. El proceso no solamente debe enfocarse en las competencias técnicas del puesto, sino que la valoración de candidatos debe contemplar revisión de las habilidades blandas. Lo ideal es realizar una evaluación integral de cada candidato tanto en sus conocimientos académicos como de su personalidad para asegurarse de que la persona a seleccionar se sienta a gusto con el trabajo y sea productiva y exitosa en el puesto. "En muchas ocasiones contratan por referencias de conocidos, sin una evaluación previa para saber si el candidato cumple o no con el perfil", recuerda Leñero.

3. Pruebe a la persona antes de contratarla. Si bien la legislación contempla tres meses de prueba para cualquier relación laboral, siempre hay algunas alertas que podrían ser motivo de una mala selección como que el trabajador se sienta agobiado o con altos niveles de estrés con el trabajo asignado al no sentirse preparado para asumir algunas responsabilidades de un puesto. Por eso es importante hacerles pruebas de tareas cotidianas y observar su desempeño.

4. Si se equivocó, reconsidere rápidamente. Si un colaborador tiene problemas de eficiencia en su trabajo a lo ideal es verificar las razones antes de ejecutar acciones definitivas, generalmente cuando son temas de falta de conocimiento en algunos casos es subsanable invirtiendo en entrenamiento para esta persona, cuando es un tema actitudinal es más complicado y en esos casos lo ideal es desvincular a la persona en el menor tiempo posible.

5. Evite repeticiones en el proceso. Hay demasiada repetición entre los entrevistadores: cuando participan varias personas en el proceso de decisión, no se ponen de acuerdo y hacen las mismas preguntas, esto es una pérdida de tiempo, esfuerzo y además es desgastante para el candidato y se desalientan por el proceso de selección.