Mujeres se unen para promover productos en El Mercadito

Un colectivo de mujeres emprendedoras y pequeñas empresarias se une cada dos meses y por un fin de semana para promover sus productos y servicios en El Mercadito, un evento que tiene lugar en algún centro comercial del área metropolitana y que estará el 11 y 12 de mayo en Plaza Tempo, Escazú.

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Marianela Jiménez

Conocer a varias madres jóvenes que trabajaban duro para sacar adelante una idea de negocios en un esfuerzo solitario fue lo que motivó hace un año a Ana Elena Rodríguez para organizar una primera mini feria que creció y creció hasta consolidarse en “El Mercadito”.

“En el grupo había inmenso talento y emprendedurismo del que ninguna había hablado. Se abrió un portillo que les hizo ver que sí se puede, que sus productos son vendibles y que existe un ambiente agradable y sano dónde poder darse a conocer”, explicó Rodríguez, quien desde el 2012 organiza el evento.

El Mercadito no tiene sede, es itinerante. Anda rodando por los centros comerciales del área metropolitana y este próximo fin de semana hospedará su sexta edición en Plaza Tempo, contiguo al Hospital Cima en Escazú.

La actividad convoca cada dos meses a unas 80 mujeres, la mayoría del Valle Central, que llegan a ofrecer una amplia variedad de productos que muchas veces ellas mismas hacen, desde zapatos, bisutería y repostería, hasta ropa para bebé y juguetes personalizados. Algunos solo se pueden conseguir ahí, lo que hace más especial el evento.

“Tratamos de darle oportunidad a todas las empresarias que se nos acercan interesadas en participar. Cuidamos que el producto sea de calidad y los resultados son tan buenos que muchas han participado en varios Mercaditos”, comentó Rodríguez.

Una de las que ha participado es Alejandra Gutiérrez, quien tiene una pequeña empresa llamada AG Artextil, que produce cosas tejidas y con la cual da trabajo a varias señoras de bajos recursos de Tirrases. También en el sector textil se ubica Melissa Coto, que hace ropa para bebés bajo la marca Noa, el nombre de su hijo.

La cantidad de stands depende de la capacidad que tenga el lugar donde se realizará la feria y cada expositora paga por su espacio, aunque lo puede compartir. Antes Rodríguez tenía que convencer y negociar con los centros comerciales pero dice que ahora son ellos los que llaman.

Sobre la experiencia que adquieren las microempresarias, resaltó que algunas tienen ventas increíbles, “otras descubren que tienen que pulir un poco más el producto para el tipo de consumidor que llega a los eventos”, y otras aprenden la importancia de la presentación de sus productos.

Para lo que queda del año harán otros cuatro Mercaditos, en sitios por definir. Si quiere más información, puede escribir al correo: info@elmercaditocr.com