Carlos Cordero
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Un negocio verde es un negocio de calidad, que al mismo tiempo genera ahorros y una rentabilidad sostenible en el tiempo. Si bien la inversión o el costo de adquisición de las tecnologías sustentables pueden ser más altos que lo convencional, el costo total de propiedad y el impacto en el medio ambiente es a menudo mucho más bajo.
La clave está en la planificación y desarrollo en el tiempo de las soluciones. En el Corporate EcoForum 2012, Mitch Jackson, vicepresidente de asuntos ambientales y sostenibilidad de FedEx, insistió que los éxitos de una empresa son producto del pensamiento innovador de ayer y los logros de mañana serán el producto de las innovaciones que soñamos hoy.
Asimismo Andrew Hoffman, profesor de sustentabilidad empresarial de la Universidad de Michigan, aseguró que la urgencia para las empresas de sincronizar la sustentabilidad, la calidad y el ahorro surge de los cambios en la consideración de los consumidores respecto al problema ambiental.
De hecho, estudios del Instituto Brookings y de la Universidad de Yale encontraron que el 70% de los estadounidenses creen que el calentamiento global es real (frente al 52% en 2010) y el 55% cree que los humanos están causando.
“Esto representa un cambio dramático de las tendencias de opinión”, dice Hoffman.
Tal toma de conciencia llevará a un cambio en el mercado y para las empresas, donde habrá ganadores y perdedores.
Para que las empresas puedan avanzar en la sustentabilidad y no convertirse en perdedoras, se recomienda:
-Alguien que se haga cargo: Para hacer frente a cualquier forma de resistencia, la empresa debe contar con un encargado o “broker climático" con credibilidad para impulsar la transformación del negocio. “La gente se siente más dispuesta a considerar los argumentos sobre la sustentabilidad cuando se presenta por las voces de su confianza”.
-Tenga en cuenta a su audiencia: Un mayor entendimiento sobre la sustentabilidad puede lograrse si se toma en cuenta las necesidades y preocupaciones de los distintos actores: clientes, socios, proveedores, aliados, distribuidores y comunidades.
-Establezca marcos de atención: Revele las consecuencias para la empresa y para cada actor de la inacción en el campo ambiental y cuáles soluciones pueden implementarse, aportando evidencias de su efectividad.
-Defina y divulgue las recompensas: Los cambios pueden ser soportados si los colaboradores y los distintos actores pueden identificar y entusiasmarse por las recompensas al implementar medidas de gestión y ahorro de energía, reciclaje, redes inteligentes, reducción de desperdicios, digitalización de procesos y eliminación de papel, productos saludables y energía alternativa.
-Acelere la innovación sustentable: Descubra las oportunidades de mejora y de innovación en procesos, productos y servicios sustentables aprovechando las tendencias hacia uso de vehículos híbridos, uso de materiales ecológicos de construcción y suministros, nuevas inversiones en energía alternativa, eficiencia energética de los productos, salud y menor impacto ecológico.
-Siga al tanto de las normativas: Nuevas normas están generándose desde diferentes entidades y Estados en campo de recursos renovables, estándares de energía para alto desempeño y eficiencia (electrodomésticos, edificios, automóviles e instalaciones industriales), mejoras en redes (red inteligente, gestión de demanda), carbono, y biocombustibles, entre otros.
-Póngase a tono con las transformaciones: El mercado está cambiando y seguirá transformándose. Las empresas deben contar con políticas para responder a nuevas iniciativas en sus industrias, en sus mercados y en la sociedad.