Carlos Cordero
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Uno de los costos a los cuales muchas empresas no le ponen atención es el de energía, al punto que puede constituirse en una fuga de dinero que le reduce las utilidades y afecta el precio al cliente final, dándole ventaja a su competidor.
De acuerdo con José María Blanco, director ejecutivo de la Fundacion BUN-CA, el peso de la factura energética depende de la actividad comercial.
“Lo que sí es un hecho es que ese gasto es cada vez más representativo en la estructura de costos, sobre todo para aquellas actividades que tienen un componente de transporte representativo”.
BUN-CA es una organización no gubernamental (ONG), constituida en 1991 con sede en San José, que fomenta el aprovechamiento eficiente de los recursos naturales para generar energía sostenible, así como conservar el ambiente, entre otros objetivos. Además apoya y asesora a las Pymes en este campo.
En la experiencia con micro y pequeñas empresas siempre ha sobresalido que muchos negocios ni siquiera consideran los gastos de electricidad y combustible como parte de los costos del producto y un determinante del precio final.
Blanco confirma esta percepción. El especialista indica que, por lo general, a lo interno de la Pyme no se conoce el perfil de consumo energético, ni se lleva un control de gasto por este concepto, lo cual se convierte en una barrera importante para emprender medidas de ahorro de energía, que por lo general, son muy rentables.
“En BUN-CA hemos estimado que, en general, se puede ahorrar en promedio un 17,5% del consumo histórico con medidas económicamente rentables”, asegura Blanco.
Los empresarios deben recordar que esta es una de las tendencias a las cuales deberán poner atención debido a los costos mayores de producción de energía.
QUÉ DEBE HACER USTED EN SU EMPRESA
¿Cuáles medidas se pueden adoptar para lograrlo?
Blanco sugiere las siguientes:
-Una inversión en la sustitución de bombillas incandescentes por lámparas flourescentes compactas tiene períodos simples de recuperación de menos de 12 meses.
-Mejorar el uso de sistemas de refrigeración mediante programas de mantenimiento es una medida muy atractiva.
-En el caso de la Pyme que utilice motores eléctricos, la operación de estas máquinas fuera de las horas pico, es una medida rentable.
¿El consumir menos energía significa que se debe disminuir el volumen y ritmo de producción afectando la productividad, el cumplimiento de los pedidos, las ventas y los ingresos de la Pyme?
“De ninguna manera, un buen programa de uso racional de la energía no debe afectar el nivel de confort de los clientes ni el volumen de producción de una pequeña industria, este es un principio fundamental del ahorro de energía”, responde Blanco.
Y agrega: “Por lo general, el consumir menos energía contribuye significativamente a otras áreas, como las medidas de producción más limpia, una gestión baja en carbono, mejores condiciones laborales, entre otras”.