Aunque se espera que sea de uso obligatorio para el segundo semestre del 2013, ninguna de las etapas que conforman el proyecto de factura electrónica ha visto la luz.
El plan piloto que se supone iniciaría en diciembre anterior, se encuentra a la espera de revisiones y de los últimos detalles de su implementación.
El atraso en las dos primeras etapas, sin embargo, no afectaría la fecha de lanzamiento del proyecto ni tampoco la obligatoriedad, según aseguró Carlos Vargas, director general de Tributación Directa.
Por pasos
Uno de los principales retos del proyecto de factura electrónica ya tiene a su lado un check . Se trata del desarrollo del aplicativo, software que Tributación Directa lanzará de forma gratuita para los trabajadores independientes.
Aún no se encuentra disponible, pues detectaron elementos que se deberían ajustar tras realizar dos rondas de prueba.
“El desarrollo del aplicativo se encuentra en proceso de prueba y validación para verificar que se cumplan todos los requerimientos”, dice Vargas.
Una vez que se otorgue el visto bueno, iniciaría la ejecución del plan piloto con los voluntarios que han expresado su interés de participar en las respectivas pruebas de uso.
Otra de las posibilidades consiste en extender la invitación a los colegios profesionales y obtener un grupo más amplio que participe en las pruebas.
“Estaríamos hablando de un grupo de entre 30 y 50 personas”, asegura el director general de Tributación Directa.
Los profesionales ofrecerían la retroalimentación necesaria que permita ajustar nuevamente el sistema.
Obligatoriedad progresiva
Planeada para iniciar a partir de julio del 2013, la idea es que la obligatoriedad sea progresiva, de manera que se puedan ir definiendo los rangos de incorporación de los sectores.
Si se utiliza la numeración de la cédula de identidad o si se hace por medio de colegios profesionales, eso dependerá de la agresividad en el proceso de incorporación, afirma Vargas.
“Se requiere medir el volumen de profesionales por colegios. Esta decisión se debe tomar cuando empiece la segunda etapa de aplicación voluntaria”, añadió el director general de Tributación.
Hablando de dinero
La inversión actual que realiza Tributación Directa en el desarrollo del software se relaciona directamente con el personal asignado al proyecto.
Y aunque se tratará de una opción gratuita regulada desde el 2009 y revisada en el 2011, no es la única disponible en el país.
Varias empresas ya ofrecen software para la implementación de la factura electrónica, entre ellas Almamater de Guadalupe S.A., Ateb Servicios S.A, Contact Center, Ineldat, Lógica Digital, Signature South Consulting y Sisnet Consulting.
Luis Paniagua, asesor en el tema de factura electrónica de GS1, asegura que actualmente unas 21 empresas han sido asesoradas en esta área y han implementado el uso de la factura electrónica de la mano con GS1.
Entre las ventajas de su uso, Paniagua menciona el ahorro de papel y la facilidad de todos los procesos del flujo comercial, pues se convierte en una proceso más rápido, más limpio y dependiendo de los relaciones comerciales, aumenta el flujo de efectivo.
Para él, el principal reto de la obligatoriedad de la factura electrónica se relaciona con un tema cultural.
Es porque asegura que se debe trabajar fuertemente en lograr que los profesionales independientes cambien el chip de los procesos de facturación actual.
“También deberían contemplarse otras variables, entre ellas los campos de los diferencias profesionales. El Ministerio de Hacienda debe ofrecer seguridad y transferencia en el manejo de esa información”, recomienda Paniagua.
El proyecto de factura electrónica fue una de las medidas que anunció la administración Chinchilla en el 2012, para enfrentar la caída del “Proyecto de ley de solidaridad tributaria”.
Solo en el 2010, el 93% de los 46.795 profesionales liberales registrados tributaron menos de ¢36.000 cada uno, de acuerdo con un informe de la Contraloría.
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Fuente Tributación Directa y GS1.