Lo barato sale caro. Versiones gratuitas del juego Bad Piggies distribuidas como plugins para Chrome están instalando inyectores de anuncios en el navegador, advirtió Barracuda Labs en su blog.
Rovio, desarrolladora del exitoso juego Angry Birds, lanzó su nueva aplicación en setiembre pasado, a $0,99 para iPhones, $2,99 para iPadsy gratis para dispositivos con Android.
Posterior a eso, aparecieron diversas versiones que afirmaban ser la original y que podían ser jugadas desde Windows, Linux o Mac OS, utilizando el browser Chrome.
Esos plugins no solo no permiten jugar la aplicación original, sino que muestran diversa publicidad en el navegador. No obstante, para BarracudaLabs, lo más peligroso es que solicita permisos para acceder a los datos y sitios visitados por el usuario. “Los juegos basados en la web no deberían estar relacionados con otras pestañas del navegador”, advierten.
Calculan que al 2 de octubre ya habían más de 80.000 usuarios de Chrome que habían instalado esos plugins maliciosos.
La firma de seguridad recordó que en otras ocasiones extensiones para Chrome han solicitado permisos extensivos, que podrían hacer que los autores de ese plugin obtengan datos, como el email o los números de la tarjeta de crédito, de los usuarios cuando navegan en Internet desde ese browser para después venderlos.