La pequeña franquicia de los helados Dippin’ Dots en Costa Rica nació con las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Desde su apertura, en febrero, tienen un cuarto frío que se puede monitorear desde sus celulares y un software empresarial para manejar sus facturas y la planilla de sus diez empleados.
Es un caso que pareciera excepcional en Costa Rica, a la luz de los resultados del último informe del Programa Hacia la Sociedad de la Información y el Conocimiento (Prosic) de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Aunque los resultados no son representativos, pues el país carece de un banco de datos con la información completa y actualizada de todas las empresas registradas, sí mide la temperatura del sector anualmente.
Este año, el sondeo realizado entre 42 empresas (un 98% de ellas mipymes) muestra un clima frío en el uso y apropiación de la tecnología de la información y comunicación (TIC): las firmas tienen computadoras en el 98% de los casos, dispositivos móviles en el 71% y todas tienen acceso a Internet.
Empero, las usan para cuestiones básicas como ver el correo, pagar el banco o guardar un respaldo de su información en la nube, y no tanto para mejorar sus flujos operativos, facturar o hacer comercio electrónico.
Esta realidad reta a los proveedores de software y de herramientas digitales. Los desafía a innovar para llegar hasta las empresas más pequeñas.
Las compañías ya tienen acceso a la infraestructura de telecomunicaciones y a equipo, pero ¿quién debe instarlas a aprovecharlas de la mejor manera?
Resultados poco alentadores
Como el cuestionario se aplicó en línea, el 100% de quienes respondieron utilizan Internet para el correo electrónico. En contraste, solo un 29% lo usó para entregar productos en línea (comercio electrónico).
Entre ellas tampoco es tan frecuente la capacitación de personal en línea (37%), las videoconferencias a través de telefonía por IP (37%), ni obtener información para hacer contrataciones (29%).
Es más normal que usen la red para hacer transacciones bancarias (92%), obtener información de bienes y servicios (82%), completar formularios en línea (74%) o resolver consultas (68%).
Lo mismo pasa con el uso de la nube: el 84% de los entrevistados dijo utilizarla como un respaldo de sus archivos, pero solo una de cada cinco la emplea para mejorar la operatividad del negocio.
Sin embargo, sí reconocen la utilidad de estos servicios.
La utilización de las herramientas en redes sociales tampoco es avanzado.
La mayoría tiene cuenta en Facebook y lo emplean para emitir mensajes o comunicarse con sus clientes, pero solo un 8% de quienes utilizan las redes las aprovechan para estudiar el comportamiento de sus seguidores
Quienes no las utilizan dicen, en su mayoría, que no las necesitan. También explican que no les alcanza el tiempo o que puede restarles privacidad.
En el futuro cercano, la falta de aprovechamiento de las tecnologías digitales le puede restar competitividad a las empresas.
Por ejemplo, la firma de investigaciones en tecnología Gartner predice que para el 2018 cerca del 30% de los costos operativos en los negocios se reducirán gracias a los aparatos inteligentes.
Si la montaña no va a Mahoma...
Los proveedores de servicios digitales y de software no son pocos en el país; hay grandes empresas como Cisco o Microsoft, y estatales como Racsa, que ya ofrecen soluciones en la nube para las mipymes con modalidades flexibles, como el alquiler y el pago por suscripción.
También hay otras menos masivas pero más especializadas como Mi-web, que es partner de Google; Grupo Inco, que hace analítica de los datos de las empresas o Grupo Babel, que ofrece soluciones de TI.
Entonces, ¿por qué las empresas no le sacan provecho a los recursos digitales, si cuentan con infraestructura y equipo?
Para el CEO de Its-Infocom, compañía que ofrece soluciones de software empresarial, el mercado de las TIC está enfocado en ofrecer productos o servicios en vez de adaptarse a las necesidades de las firmas.
“Estamos en una fase muy orientada hacia lo técnico. Venden tecnología, pero no las soluciones”, dijo Naranjo.
Gartner también proyecta que, para el 2017, el 70% de los negocios digitales exitosos dependerán de su capacidad de cambio para adaptarse a las necesidades de los clientes.
Édgar Oviedo, presidente de Grupo Babel, cree que es necesario que una entidad estatal orqueste un proceso en el que se encuentren las mipymes de sectores primarios, como la agricultura, con otras que ofrezcan soluciones tecnológicas.
“Si ellos no vienen a nosotros, somos nosotros quienes deberíamos llegar a ellos”, dijo.
Él le aconseja a los empresarios más tradicionales que se adapten a la tecnología de un modo escalonado.