Ella es emprendedora, vio que otras mujeres necesitan una plataforma para impulsar sus negocios y creó Bendita

Así creó Bendita, una plataforma que hasta el momento reúne a casi una centena de emprendedoras, las promociona y permite que las consumidoras descarguen cupones de descuentos y lo rediman en el negocio directamente.

“La idea es que sea grande, que las consumidoras que requieren un servicio o un producto piensen en Bendita como ahora piensan en Uber Eats cuando quieren hacer un pedido”, dice Mariana. Los planes que tiene son muchos más.

Mariana tiene actualmente 36 años y ahora vive en Santa Ana con su esposo Esteban González, un hijo y una hija.

Oriunda de Curridabat, ella estudió en el Saint Lawrence School y luego se graduó en administración de empresas con énfasis en mercadeo de la Universidad Latina en 2009. Lo suyo no es quedarse con menos.

Como estudiante ella se califica como aplicada, con un excelente. Es apasionada con el mercadeo y no parece quedarse en un sitio a esperar. Un año antes de graduarse empezó a trabajar en Essity, una firma de productos de salud e higiene. Ahí estuvo cuatro años más. Salió porque tenía el sueño de viajar a otro país a estudiar.

En 2013 estudió y se graduó en la ESIC Business & Marketing School, ubicada en Madrid, España. Se graduó en el máster de mercadeo y gestión comercial. Regresó a Costa Rica, se casó y siguió trabajando en compañías dedicadas al mercado masivo.

Primero en Mondelēz y luego en Dos Pinos, en esta última entre 2015 y 2017, cuando nació su primer hijo y a Eduardo le dieron una beca para estudiar un postgrado en leyes en Barcelona. Allá viajaron los tres. Por supuesto que Mariana aprovechó la estadía en la Ciudad Condal.

En Barcelona llevó otro curso de mercadeo digital, en momentos en los cuales seguía el auge de las redes sociales, las tiendas en línea y las plataformas digitales a nivel comercial. En el nuevo regreso a Costa Rica la esperaba una nueva ruta, la de emprender.

Con su hermano Ignacio había analizado la posibilidad de instalar un bar con un concepto diferente, pero los trámites de la municipalidad tardaron mucho. El atraso redirigió otra vez el camino a seguir.

Su cuñado Pedro, el cuñado de éste, Roberto Chavarría, y un primo de Roberto, Esteban Ulate, le propusieron a Mariana y a Ignacio que se les unieran como socios en el proyecto de un bar que habían abierto en Barrio Escalante, cerca de la Antigua Aduana. Era 2018.

En medio del auge comercial de la zona, ese primer año estaba siendo difícil. Mariana es fanática de los datos y el análisis. Esgrime la información sin dudar para apuntalar lo que está observando de los negocios. Se apoyaron también en una agencia y en un estudio de mercado que le encargaron. Así descubrieron una oportunidad.

Al bar le dieron un nuevo enfoque, de bar y restaurante inglés, y lo relanzaron como Sásta Pub, con ambiente, decoración, música, bebidas y platos típicos de Inglaterra. El menú se adereza con bocas locales (como chifrijo y ceviche) para el gusto tipo. El público meta es variado, pero lo disfrutan especialmente adultos jóvenes que desean conversar, escuchar música y comer bien en un lugar acogedor. Dio resultados.

Las ventas empezaron a levantar y mantuvieron un crecimiento constante durante 2019 y hasta marzo de 2020 cuando se decretó el confinamiento por la pandemia del Covid-19. Las ventas en ese momento eran 66 veces menos que un mes atrás. Había que actuar con rapidez y sin dudas.

Con los meseros diseñaron un menú express para aprovechar las materias primas y que no se desperdiciara nada, liquidaron al personal y negociaron con el propietario del local que les alquilara el sitio como bodega. En ningún momento pensaron en sepultar ahí el proyecto. Solo había que esperar.

Reabrieron a finales de octubre de 2020, aprovechando las actividades de Halloween, con un menú reducido y aforo limitado. Los resultados volvieron poco a poco.

El concepto de un pub inglés alcanzó para volver a atraer clientes, lograr el punto de equilibrio, renegociar otra vez el alquiler con el propietario (ahora con una nueva fórmula), lograr el nivel de ventas de antes de la pandemia y superarlo desde el segundo trimestre de este 2022. En ese tiempo, Mariana le dio vueltas a la idea de Bendita.

A mediados de 2020, cuando nació su hija, Mariana estaba con la duda de si volvía al mundo corporativo. Durante esos meses de confinamiento y restricciones, estrechó su contacto con las amigas que eran emprendedoras y conoció a otras mujeres que tenían negocios. En todas vio un denominador común.

Ellas se acercaban y, como sabían que Mariana es especialista en administración y en mercadeo, especialmente, le planteaban alguna situación que vivían en sus empresas. Mariana les brindaba alguna sugerencia y ellas la aplicaban, agradecidas. Mucho más porque les daba resultados.

“Son muy buenas en lo que hacen, pero vi que tenían necesidad de conocimientos en administración y mercadeo”, cuenta Mariana. El problema era cómo brindar una solución sostenible.

En eso una amiga le contó que en España había visto plataformas donde se daban a conocer los varios negocios, se hacía promoción, cada empresa daba un cupón de descuento y los clientes se registraban para descargarlos y luego redimirlos. Fiel a sí misma, Mariana investigó.

Uno de sus hallazgos es que las compras de las personas es impulsada tanto por recomendaciones de sus amistades y familiares y por el precio de los productos y servicios, más en momentos como los actuales de crisis.

El estudio de la Universidad de Costa Rica sobre ventas en línea en el país muestra que la mayoría de quienes realizan compras en plataformas son mujeres y se enteran por medio de diferentes canales digitales.

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Mariana pensó en los negocios de belleza y estética. Luego amplió la idea a un total de más categorías.

En marzo de 2022 nació Bendita, con ocho emprendedoras, como una plataforma web donde las emprendedoras muestran los productos que venden y los servicios que brindan, como un directorio digital de negocios. ¿Cuáles empresas tienen espacio en Bendita?

“Negocios liderados por mujeres y empresas que apoyan la participación de las mujeres en la economía”, dice Mariana.

Los requisitos son: que por lo menos una mujer sea dueña o socia del negocio, que el 50% del personal sean mujeres, que el 50% de los puestos gerenciales sean ocupados por mujeres o que alguna mujer sea vocera o imagen de la marca o negocio.

En este momento hay 98 emprendimientos de categorías como belleza y cuidado personal, salud y bienestar, ropa, zapatos y accesorios, gastronomía, hogar, entretenimiento, educación, y apoyo empresarial (asesoras, consultoras, de mercadeo, agencias de publicidad, contadoras y abogadas, entre otros). Registrarse no tiene barreras.

Cada negocio puede crear y modificar en forma autónoma en la plataforma su perfil, su reseña de productos y servicios, subir el logo, incluir datos de contacto y dirección de la tienda física (incluso el Waze), el horario de atención y la presencia digital (redes sociales y dirección del sitio web). Para la lógica comprobación de cada negocio se pide información adicional. Una vez corroborado, queda publicado.

El registro y la membresía es sin costo para las empresas y para las clientes que deseen descargar los cupones de descuentos, giveaways, certificados de regalo o dejar comentarios o reviews de los negocios. De hecho, ya hay más de 560 consumidoras registradas.

Por ahora, también los cursos del programa de Aprendamos Juntas y que incluye charlas virtuales de desarrollo profesional y personal. El próximo martes realizarán una sobre cómo crear presupuesto efectivo en la familia y el negocio.

Es una actividad de gran utilidad en momentos como los actuales, de crisis. Ya han realizado otras sobre diferentes temas y en cada una participan hasta 30 emprendedoras.

Los cursos y charlas también generan comunidad, contactos de negocios y para las expositoras (que también son emprendedoras y ofrecen servicios profesionales) posibilidades de que luego las contacten y puedan generar ingresos a partir de asesorías y consultorías en sus áreas de especialidad.

Hasta ahora, Mariana ha financiado Bendita con sus propios ahorros. Pero ya tiene claro cuál modelo de negocios seguirá.

El propósito actual es dar a conocer a la plataforma, atraer emprendedoras y generar tráfico y que los negocios de mujeres aumenten sus ventas e ingresos. Para Mariana eso seguirá siendo parte del atractivo principal. A la par generará proyectos que generen ingresos para sostener la plataforma.

¿Cómo se haría?

Con eventos de networking y un programa de formación en emprendimiento. También se incorporarán otros servicios y proyectos en alianza con las emprendedoras, que impulsen sus ventas y generen ingresos a Bendita, siempre dentro de la filosofía de una plataforma digital colaborativa que conecta negocios liderados por mujeres.