Nadie debe ser obligado a vacunarse contra el COVID-19

Es responsabilidad de cada uno cuidar de su salud, no del Estado

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¡Somos seres humanos libres! Somos adultos. Es responsabilidad de cada uno cuidar de su salud, no del Estado.

Cada uno sabrá si se vacuna o no. Cada cual sabrá si sale o se queda en casa. Quien salga, es responsable por las precauciones sanitarias que tome. No somos esclavos del gobierno ni de nadie para que nos impongan vacuna alguna y nos violen el ejercicio de nuestra libertad individual.

Quienes creen en la vacunación no tienen derecho a imponérsela a quienes no creen en ella. Quienes no creen en la vacunación no tienen derecho a impedir que se vacunen a aquellos que así lo deseen. ¡Respetemos las decisiones de otros sobre sus vidas! La paz social solo se alcanza cuando se respeta el ejercicio de la libertad individual.

En este sentido, la obligatoriedad de vacunarse me recuerda al fascista Benito Mussolini quien decía: “Todo en el Estado, nada contra el Estado, nada fuera del Estado”.

Ahora bien, en una relación laboral, el empleador pone las reglas de juego y estas están reguladas por la legislación. Habría que estudiar qué dice la jurisprudencia con relación a la vacunación obligatoria en una relación laboral.

Yo creí que el gobierno del Partido Acción Ciudadana (PAC) era partidario de la filosofía “mi cuerpo, mi decisión”. ¿No fue este principio que llevó al Poder Ejecutivo a firmar la norma técnica para la interrupción terapéutica del embarazo?

¿Dónde están los progresistas gritando: ¡Mi cuerpo, mi decisión!?