Las elecciones nacionales de Costa Rica se celebrarán el próximo domingo 6 de febrero, pero esta vez contarán con un lineamiento dispuesto por el Ministerio de Salud y el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) para reducir el riesgo de contagio de la COVID-19.
En dicho lineamiento se establece que los centros de votación deberán contar con estaciones funcionales para el lavado de manos (agua, jabón y toallas desechables para el secado de manos), o en su defecto tendrán que colocar dispensadores de alcohol al 70% en la entrada.
Al apersonarse al centro de votación, los electores tendrán que cumplir con la desinfección de manos disponible en el lugar. También, tendrán que usar la mascarilla en todo momento y mantener el distanciamiento de 1,8 metros.
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Según el lineamiento del Ministerio de Salud y el TSE, los electores tendrán que ingresar sin acompañantes al centro de votación correspondiente. Esta disposición no aplica para personas con discapacidad o adultos mayores que sí requieran de un acompañante.
Además, para evitar aglomeraciones de personas electoras en la parte externa de los centros de votación, así como en la vía pública, no estará permitida la presencia de guías, ni la instalación de toldos, equipos de sonido fijos, grupos de música en vivo, cimarronas, comparsas u otros.
“El TSE procurará habilitar en los centros de votación de mayor afluencia de electores la figura de encargados COVID-19; quienes estarán atentos a que los electores acaten los protocolos sanitarios generales”, dice el lineamiento.
Asimismo, cuando la persona ingrese a la junta receptora de votos (JRV), tendrá que mostrar su cédula de identidad, dejarla sobre el escritorio o colocarla sobre la base que para tales efectos estará disponible, mientras ejerce su derecho al voto; para evitar que el miembro de mesa tenga contacto físico con dicho documento.
Para que los miembros de mesa comprueben la identidad del votante, y conservando el debido distanciamiento físico, el elector deberá quitarse la mascarilla, brevemente, para mostrar su rostro completo.
Hecho esto, un integrante de la JRV o el auxiliar electoral, le facilitará al elector un crayón -previamente desinfectado- para que marque las papeletas; sin embargo, el votante podrá negarse a recibirlo y utilizar su propio lapicero.
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En estas elecciones nacionales, al igual que en comicios anteriores, no podrán haber más de dos electores, de forma simultánea, ejerciendo su derecho al voto.
Una vez que el ciudadano ejerza el sufragio, deberá recoger su cédula de identidad antes de salir de la JRV y tendrá que retirarse del centro de votación inmediatamente, para evitar aglomeraciones.