G20 inicia reunión para acabar con el estancamiento de la economía mundial

"La economía sólo se reactivará lentamente en 2013", advirtió en Moscú el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn.

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El G20 de las principales potencias industrializadas y emergentes comenzaron este viernes un encuentro de dos días en Moscú con la intención de impulsar políticas para poner fin al "estancamiento" de la economía mundial y la esperanza de alejar la amenaza de una "guerra de monedas", que Japón reavivó.

El "principal desafío" del G20 es el de sacar "la economía mundial del estancamiento y de la incertidumbre para ponerla en una trayectoria firme de crecimiento", declaró el presidente ruso Vladimir Putin al inaugurar en el Kremlin la sesión de reuniones.

Por primera vez en mucho tiempo los temores sobre un estallido de la zona euro y de su moneda no focalizan los debates de la reunión. Pero las estadísticas publicadas la víspera de este encuentro pusieron nuevamente a Europa en la mira: la recesión fue más grave que lo previsto el año pasado en zona euro. Y "la economía sólo se reactivará lentamente en 2013", advirtió en Moscú el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn.

Se trata del principal freno a la reactivación mundial.

Rusia hizo justamente de la búsqueda de nuevas "fuentes de crecimiento" un prioridad de su presidencia del G20, que culminará con una cumbre a principios de septiembre en San Petersburgo.

La Comisión Europea, que generalmente mantiene una rígida postura sobre el tema, acaba de aceptar la posibilidad de acordar nuevos plazos para la reducción de los déficit. Queda por saber si Alemania, que es aún más ortodoxa, aceptará flexibilizar la austeridad.

Algunos países europeos, con Francia al frente, se inquietan además por el vigor del euro, que penaliza las exportaciones. Más en general, la zona euro denuncia las políticas monetarias de Estados Unidos y de Japón, que activan las imprentas de billetes para sostener sus economía, con como efecto la depreciación de sus monedas.

"No queremos intervención de los Estados en las tasas de cambio", afirmó el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble.

Los temores de una "guerra de monedas" provocados por un encadenamiento de devaluaciones competitivas llevadas a cabo por países en búsqueda de crecimiento fueron reavivados por el reciente giro japonés. El Banco Central de Japón cedió a las presiones del gobierno para sostener la economía creando moneda, una política común en Estados Unidos pero que se prohíbe aplicar el Banco Central Europeo (BCE).

"La 'guerra de monedas' estará nuevamente en el primer lugar del orden del día del G20, ya que los principales países emergentes (Brasil, India, Turquía y Rusia) acusarán nuevamente a Occidente de debilitar deliberadamente o de facto su propia moneda, lo que refuerza las divisas de las economías emergentes", estimó el economista Jan Randolph, de IHS Global Insight.