Diferencia entre tasas en colones y en dólares se ha acortado durante el 2016

Brecha era de 3,4 puntos porcentuales en mayo, pero ahora ronda 2,5 puntos

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El descenso que ha tenido la Tasa Básica Pasiva (TBP) durante el 2016 está afectando parcialmente el diferencial que existe entre los intereses en colones y dólares.

Si la tendencia se mantiene, para un ahorrante valdrá lo mismo tener su dinero en colones o en dólares y es posible que prefiera la divisa ante la posibilidad de que las tasas en el exterior suban.

La primera señal de que el diferencia se estrecha, se ve en las referencias de las tasas pasivas, a saber, la TBP y la Tasa Efectiva en Dólares (TED), pues desde mayo pasado –cuando se creó la última– la diferencia entre una y otra se ha ido reduciendo.

Para ese entonces, la brecha era de 3,42 puntos porcentuales, pero estaba en 2,55 puntos el 16 de noviembre pasado.

Lo anterior fue posible porque los rendimientos en dólares se han mantenido relativamente estables como reflejo de lo que sucede con las tasas en el exterior.

Las menores diferencias entre tasas no siempre pueden ser reflejo de mejores condiciones para los que tienen un crédito, pues la brecha se puede reducir si las operaciones en colones se mantengan estables y en dólares empiezan a subir.

Estos ajustes en las tasas de moneda nacional responden, en parte, a descensos en los rendimientos ofrecidos por las entidades financieras en operaciones a plazo, pero también porque a inicios del 2016 se hizo un cambio en la metodología de cálculo de la TBP, la cual incluyó un ajuste a la baja en el transcurso de un año.

Posteriormente, en mayo empezó la publicación de la TED, con una metodología similar con la TBP y que, por ende, permite una comparación más justa.

Efecto en cadena

Estas tasas de referencia dan un indicio de que el resto de rendimientos que las entidades pagan a los ahorrantes por operaciones a plazo están a la baja y a un ritmo relativamente lento.

Sin embargo, al ver los rendimientos en colones y en dólares, el comportamiento es irregular o relativamente volátil este año.

En algunos casos la diferencia entre mayo y el 16 de noviembre pasado es mínima.

Por ejemplo, en los bancos públicos el margen entre ambas monedas pasó de 3,15 puntos porcentuales a 2,39 puntos.

En el caso de los bancos privados, el cambio fue de 2,02 puntos a 1,65 en el periodo.

A lo largo de este año, el Banco Central de Costa Rica ha argumentado que el efecto de las disminuciones en la Tasa de Política Monetaria –que aplicó en el 2015– se han trasladado al resto de tasas lentamente durante el 2016.

El efecto se aprecia tímidamente en las tasas activas (las que se pagan por los créditos).

En el promedio que registra sistema financiero, la reducción en el margen es casi de un punto porcentual.

Para Manfred Lacayo, gerente financiero de la Financiera Desyfin, el traslado a las tasas activas sí ha ocurrido para los créditos en colones que están ligados a la TBP.

Sin embargo, las tasas pagadas en los certificados de depósito a plazo son fijas y solo se ajustan al momento de los vencimientos y renovaciones de esos ahorros.

“Esta situación provoca un efecto negativo en los ingresos de las entidades financieras, dado que se deben ajustar gradualmente ante las variaciones del entorno”, agregó.

Según Lacayo, es posible que el mediano plazo se trasladen más ahorros a moneda extranjera debido a que el diferencial entre ambas se reduzca y, por lo tanto, no sea significativo para cubrir una eventual y posible devaluación más pronunciada, que en términos interanuales ya suma 4%.

Adriana Rodríguez, gerente de análisis económicos de Scotiabank, explicó que la TBP ya no es un reflejo del comportamiento del resto de tasas en el mercado financiero, pues con el cambio metodológico, se quedó sin plazo definido y, por lo tanto, tiene limitaciones para reflejar los costos de captación de las entidades.

Según la economista, para el 2017 no se vislumbran disminuciones adicionales en tasas de la moneda local, por el contrario, la expectativa es de incremento, pero estos quedarán ocultos o reflejados parcialmente en la TBP por el esquema de cálculo.