FED advierte que el crecimiento se desaceleró en algunas partes de Estados Unidos

Filadelfia, Richmond, Chicago y Kansas City informaron de una ralentización en sus economías locales

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El crecimiento económico se desaceleró en algunas regiones clave de Estados Unidos, de septiembre a principios de octubre, reveló el miércoles la Reserva Federal, debido a que aumentaron las preocupaciones de las empresas por el estancamiento presupuestario que derivó en el cierre parcial del gobierno.

El crecimiento general mantiene su ritmo, de modesto a moderado, de acuerdo con un sondeo de la FED. Ocho de los 12 distritos financieros de la Fed tuvieron la misma tasa de crecimiento registrada de agosto a principios de septiembre.

Sin embargo, cuatro distritos —Filadelfia, Richmond, Chicago y Kansas City— informaron de una desaceleración del crecimiento.

Las empresas en el país mantenían su optimismo sobre el futuro en tanto que continuaba aumentando el gasto por parte de los consumidores, auspiciado por las fuertes ventas de automóviles.

Sin embargo, muchas empresas acusaron un aumento de la incertidumbre por el cierre parcial del gobierno, que comenzó el 1.° de octubre, y por el acercamiento del plazo para elevar el límite del endeudamiento federal.

Boston, en particular, informó que al sector turístico le preocupaban las consecuencias de una parálisis prolongada en el gobierno federal. Y varios distritos informaron que las empresas actuaban con cautela para hacer contrataciones.

Los líderes del Senado anunciaron el miércoles que tenían un acuerdo para evitar la amenaza de una mora de pagos de deuda y reanudar el funcionamiento total del gobierno tras una parálisis parcial que ha durado 16 días.

Ante la posibilidad de que también la Cámara de Representantes apruebe la medida, muchos anticipan la luz verde de ambas cámaras al término de la jornada.

El sondeo de la FED, conocido como libro beige, será utilizado por los estrategas del banco central en su próxima reunión del 29 y 30 de octubre.

Los economistas creen que la FED mantendrá sus compras de bonos por $85.000 millones al mes para contrarrestar las consecuencias de la parálisis del gobierno.