Solo Recope y el ICE cumplen con directriz de Gobierno para bajar costo de deudas

Recope e ICE ya hicieron gestiones para bajar el costo de pasivos; AyA, CNFL, Jasec y ESPH pendientes

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De las seis entidades públicas a las que el Gobierno les pidió reestructurar sus deudas, solo dos han hecho alguna gestión para tratar de que sus actuales pasivos sean más baratos.

Se trata del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), que hicieron trámites recientes con el fin de abaratar sus deudas o bien, extenderles el plazo de vigencia.

El pasado 7 de marzo, la presidenta Laura Chinchilla dictó una directriz para que el ICE, Recope, el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL), la Empresa de Servicios Públicos de Heredia (ESPH) y la Junta Administrativa de Servicios Eléctricos de Cartago (Jasec) reduzcan sus costos de operación, no aumenten los gastos en salarios más allá de los ajustes que sean decretados y que hagan mejoras en sus deudas.

La directriz fue publicada en La Gaceta el pasado 14 de mayo.

La orden presidencial se origina por el incremento en los precios de los servicios regulados, que llevaron al Índice de Precios al Consumidor (IPC) a registrar una variación interanual de 6,31% al final del mes pasado, cifra que está fuera de la meta anunciada por el Banco Central para este año (entre 4% y 6%).

El incremento en la inflación ha ocurrido, principalmente, por ajustes al alza en la electricidad, el transporte y los combustibles.

Antes de la orden

Las instituciones que efectuaron algún ajuste lo hicieron antes que se dictara la directriz desde la Presidencia.

Recope negoció nuevas condiciones para una deuda en los primeros meses del 2013 y el ICE ya había anunciado que emitiría $500 millones en bonos corporativos para pagar deudas con costos más altos.

En este último caso, el ICE salió al mercado internacional el pasado 8 de mayo y logró colocar a un plazo a 30 años y a una tasa de 6,375%.

Al cierre del 2012, esta empresa registró pasivos de largo plazo por $1.334 millones y efectos por pagar (intereses) en el corto plazo por $243 millones.

El gerente general del ICE, Martín Vindas, dijo días atrás a EF que empezarían a notificar a las entidades acreedoras con el fin de dar término a las deudas.

Vindas no respondió a las preguntas enviadas por correo electrónico acerca del detalle de cada deuda que se cancelaría.

Por su parte, el AyA no confirmó si están renegociando deudas.

Su oficina de prensa solamente envió un listado de los pasivos que mantiene vigentes. Entre estos se encuentran dos préstamos que pactaron en el 2012.

Uno de estos créditos se concretó el 16 de octubre pasado y ofrece, en este momento, condiciones adversas para la institución. La operación fue por ¢934,4 millones a Tasa Básica Pasiva (TBP) más 4,5 puntos porcentuales, con una tasa mínima de 13,5%.

Si solo se aplicara la fórmula en este momento, el interés que pagaría el AyA sería de 11,2% de no existir la tasa piso.

Respecto a Recope, la entidad refinanció una deuda de $30 millones que le había girado el Banco Centroamericano de Integración Centroamericana (BCIE) y que vencía en el primer semestre del 2017.

Si Recope seguía con esa deuda, pagaría por semestre $3,68 millones por semestre. El cambio vino cuando logró negociar con Scotiabank nuevas condiciones, entre las que incluyó un alargamiento del plazo por dos años más, una cuota fija por los próximos años y una menor tasa efectiva, detalló su gerente financiero, Édgar Gutiérrez.

A partir de este momento, la cuota semestral será de $2,86 millones y una tasa de 4,71%.

Según el funcionario, esta es la única deuda que tenía posibilidades reales de ser modificada.

El director administrativo de la CNFL, Marvin Céspedes, se limitó a decir que la entidad se encuentra gestionando nuevos financiamientos para mejores condiciones de tasas y plazos, pero declinó dar detalles de las deudas que cambiarían.

La distribuidora de energía eléctrica –subsidiaria del ICE– incrementó en el 2012 en un 51% sus deudas de largo plazo en términos reales, según sus estados financieros auditados.

Parte del aumento se debió a una nueva deuda por ¢40.428 millones pactada con el Banco de Costa Rica (BCR) a una tasa variable y ligada a la TBP y a una nueva emisión de bonos por ¢12.000 millones, también con un interés fluctuante.

De las diez deudas de largo plazo que la compañía tiene, tres están a tasa variable, pero una mantiene un interés relativamente alto respecto a las condiciones actuales del mercado. Por ejemplo, los bonos emitidos en el 2010 tienen un rendimiento de 11,45% anual (en colones).

Jasec informó que en el último año y medio el único ajuste hecho fue una extensión en el plazo de uno de los ocho préstamos vigentes.

Por su parte, la ESPH detalló que someterán la directriz a consulta jurídica para determinar si realmente le afecta en alguna medida.

La directriz

La directriz 48 de la Presidencia de la República publicada el 14 de mayo del 2013 establece lo siguiente:

Reestructurar su deuda y otros mecanismos de contratación de financiamiento ya adquiridos, de forma tal que sean más eficientes y acordes a las condiciones de mercado y a las características de los activos financiados.

Procurar mecanismos de contratación de financiamiento de nuevos proyectos que se ajusten a las características de los activos financiados.

Fuente La Gaceta.