Los millenials representan progresivamente una mayor cuota de la fuerza laboral. Y por eso, tomar el tiempo y los recursos para entender sus motivaciones ayudará a las organizaciones a realizar una más efectiva gestión del talento.
Fomentar acciones de carácter social: Uno de los principales alicientes para que ellos se decanten por una empresa es el impacto positivo que esta genera en la sociedad. En un estudio reciente, el 76% de los encuestados afirma valorar muy positivamente la posibilidad de contribuir con acciones sociales.
Sus mejores embajadores de marca: Muchos se consideran “superconectados”, usuarios que invierten más tiempo que la media en Internet y redes sociales. Involucrarlos en actividades de la empresa aumentará su fidelidad y, por consiguiente, pasarán a ser embajadores de la marca.
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Potenciar su educación y destrezas: Invertir en su formación no solo aumentará su productividad y competitividad, sino que los acercará aún más a los valores de la empresa, reteniendo de esa forma su talento en la organización.
Flexibilidad laboral: La mayoría considera que la flexibilidad laboral mejora el rendimiento, aumenta la productividad y fideliza a los empleados, reforzando su felicidad y bienestar personal.
Buscan líderes francos y directos, pero rechazan el radicalismo: La mayoría rechaza a los líderes que toman posturas controvertidas o que causan división. También a aquellos que defienden transformaciones radicales en vez de cambios graduales. Se sienten mucho más cómodos con aquellos líderes que utilizan un lenguaje claro y sencillo.
Deseo de seguridad laboral: Los millennials parecen haberse asentado; buscando seguridad laboral y trabajos a tiempo completo. Este año solo un 7% de los encuestados afirma querer “cambiar pronto” de puesto de trabajo.