Tras la partida del CEO de McDonald’s, se va su director de Recursos Humanos

Davis Fairhurst renunció este lunes a la compañía que ingresó en 2005

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Los problemas no cesan a la cabeza del gigante estadounidense de comida rápida McDonald’s: al día siguiente del anuncio de la salida del director general debido a una relación “consentida”, pero contraria a las reglas con una empleada, el director de recursos humanos también deja la empresa.

David Fairhurst renunció este lunes a la compañía a la que ingresó en 2005, dijo a AFP un portavoz de McDonald's sin proporcionar más detalles ni indicar si esta partida está relacionada con la de Steve Easterbrook.

Este último fue presionado a irse después de que la junta directiva determinara el viernes que había demostrado error de juicio al entablar una relación con una empleada, violando el reglamento interno de la firma. El mismo Easterbrook reconoció en un mensaje a los empleados que había cometido “un error”.

Al igual que Easterbook, Fairhurst trabajó para McDonald's en Europa antes de mudarse a la sede de la compañía en Chicago. Había sido promovido como director de recursos humanos poco después de la llegada de Easterbook como jefe de la empresa.

Según los documentos enviados a las autoridades bursátiles este lunes, McDonald’s pagará a su exCEO una cantidad equivalente a seis sueldos: unos $670.000 en función de su salario base de 2018 ($1,34 millones por año). Agregando bonos, opciones sobre acciones y otras compensaciones, su remuneración total ascendía a $15,9 millones anuales.

Easterbook también se ha comprometido a no trabajar para un competidor de McDonald's durante al menos dos años.

El salario base de su reemplazante, Chris Kempczinski, se fijó en $1,25 millones al año.