Internet de las Cosas y nuevas tecnologías colocan a empresas ante la paradoja del negocio digital

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Las tecnologías como Internet de las Cosas, la impresión tridimensional (3D) y las aplicaciones de la economía colaborativa —como Uber— crean una nueva era de desarrollo de negocios digitales de la que no escapan las empresas tradicionales.

"Es el negocio del instante, de servir al cliente en lo que necesita en el momento exacto", dijo Patrick Meehan, vicepresidente de investigación de Gartner, la reconocida firma de estudios de mercado especializada en la industria tecnológica.

Meehan estuvo invitado en el evento "La paradoja del negocio digital" organizado por la Cámara de Tecnología de Información y Comunicación (Camtic) y realizado este lunes en la tarde en la sede de la Fundación Omar Dengo.

El especialista ejemplificó que las nuevas tecnologías permiten a las empresas determinar las necesidades de los clientes y enviarles sus ofertas en el instante, cuando lo requiere.

Eso sí, las compañías deben definir claramente cuál es el valor que brindarán al cliente y cómo escalarán su negocio para lograrlo.

"La paradoja consiste en que se debe analizar los riesgos de adoptar esas tecnologías y los riesgos de no hacerlo", explicó. "Será imposible detenerlas. Ningún gobierno podrá".

Tras el desarrollo de los sistema informáticos, de Internet, y del comercio electrónico, en la actualidad se vive un nuevo punto de inflexión con las nuevas tecnologías y aplicaciones.

Aquí las manufacturas tradicionales han reconvertido sus negocios: terceros fabrican los productos y las marcas se apoyan en las tecnologías para hacerlos llegar a sus mercados.

Durante el evento también se presentaron datos sobre la inversión en ciencia y tecnología en el país, telecomunicaciones y del sector de tecnologías digitales.

"El futuro del país está en la economía del conocimiento", dijo Luis Carlos Chaves, presidente de Camtic.

Chaves insistió que para aprovechar la base tecnológica existente y potenciar al sector se requiere –aparte de recursos humanos que resuelvan el déficit de 7.000 a 8.000 personas en esta industria– una política unificada en el país.