Samsung venderá nuevo smartphone con partes recicladas del Galaxy Note 7

Empresa surcoreana venderá solo 400.000 unidades del Note FE

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Samsung Electronics informó este domingo de que reciclará partes de su fallido teléfono el Galaxy Note 7 para usarlas en un nuevo modelo que comenzará a venderse el viernes próximo en Corea del Sur.

Se trata del El teléfono Galaxy Note FE, que utilizará partes nuevas del Note 7 y que costará unos $611, es decir unas tres cuartas partes de su precio original.

Galaxy Note 7 de Samsung tenía defectos de diseño en sus baterías

La compañía mencionó que solo venderá 400.000 unidades y que el Note FE es "completamente seguro" .

El modelo original, el Note 7, fue uno de los mayores fiascos en la historia de la compañía. Su lanzamiento fue en agosto de 2016 y destacó por ser uno de los teléfonos más caros de la compañía surcoreana, con precios que iban desde los $850.

Sin embargo, al poco tiempo emergieron reportes de que las baterías de los celulares se sobrecalentaban y se incendiaban. Samsung retiró el modelo del mercado al mes de haberlo lanzado y sacó otro con baterías diferentes que también se calentaban mucho, así que la empresa descontinuó el modelo.

LEA: Utilidades de Samsung suben 50% pese a fiasco con Galaxy Note 7

Samsung gastó miles de millones de dólares en retirar el modelo y tratar de mejorar su imagen. A principios del año, la compañía culpó de las fallas a dos fabricantes de baterías.

Luego de presiones por parte de activistas ambientales, Samsung dijo que el Note FE es parte de sus esfuerzos para minimizar los residuos.

LEA: Samsung intentará lavarse la cara con el nuevo Galaxy S8