Usuarios generan 2,5 quintillones de bytes en datos diarios, dice comScore

Negocios pueden aprovechar información de clientes a través de plataformas de Big Data

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.


Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

La disponibilidad cada vez mayor de dispositivos con capacidad de conectarse a Internet está generando un volumen de información "sin precedentes", el cual que podría ser aprovechado por los negocios para definir estrategias más efectivas al dirigirse a sus mercados.

Según la firma de estudios de mercado, comScore, diariamente se crean en el mundo 2,5 quintillones de bytes como producto de tener 2,4 millones de usuarios de Internet y 1,5 millones de propietarios de smartphones, a lo que se suma la expansión de las tabletas en el mercado (que en el 2012 rebasaron las ventas de computadoras).

En todos los casos la cantidad de usuarios sigue creciendo. De acuerdo con Cisco para el 2018, la mitad de los 7.600 habitantes tendrá acceso a Internet en sus hogares y Gartner pronostica que para el 2020 habrá 26.000 millones de dispositivos conectados mediante Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés).

De hecho, el 92% de los datos fueron generados en los últimos dos años en buena parte por el alto consumo de información: comScore dice que los usuarios de smartphones pasan 98 minutos al días usando aplicaciones, lo que supera los 12 minutos diarios haciendo llamadas.

El consumo de datos seguirá creciendo pues muchos procesos y objetos fícisos se están desmaterializando a través de su digitalización, como los pases de abordar o pasajes de avión, ticketes de conciertos, pagos en tiendas al detalle, el mismo dinero (a través de bitcoin) y hasta los documentos de identificación personal y los pasaportes.

La gran cantidad de información ya demanda altas inversiones. Anualmente el gasto en Big Data (bancos de datos) crece 30% y alcanzaría $114.000 millones para el año 2018, dada la importancia que adquiere la información en los negocios para alcanzar "interacciones relevantes" con sus clientes.

Dado que los clientes pasan conectados -a través de tabletas, smartphones, videojuegos y PC- las compañías podrían obtener un mayor alcance y mejorar la efectividad de su publicidad.

Esto se aplica en todos los mercados, pues -por ejemplo- el 86% de los usuarios de Internet en Estados Unidos observa vídeos en línea y, según comScore, en América Latina países como Brasil, Argentina, Colombia, Chile y México tienen un alcance similar (entre 82% y 87%).

Más de la mitad de los usuarios emplean alternativamente varios dispositivos para estar en línea y en este grupo el consumo de contenido es 23% mayor.

De hecho, los smartphones y las tabletas duplicaron el tiempo en que los consumidores están conectados, pues en Estados Unidos se pasó del 2010 al 2013 de 7,51 horas a 15,20 horas por día el tiempo que se pasa en Internet.

Para las empresas esto es estratégico, pues los clientes se involucran con múltiples plataformas y a través de múltiples canales en diversos momentos del día, insiste comScore, lo que puede permitir obtener un perfil de cada uno, basándose en sus datos demográficos, de relaciones (a partir de las redes sociales), de comportamiento, de actitud y de actividades.

Lo que las empresas deben tomar en cuenta es que la tecnología para el procesamiento de la información debe permitir "generar inteligencia" sobre los consumidores mediante algoritmos específicos para recolectar y realizar los análisis de consumo digital de publicidad, Internet, vídeo, datos móviles, medios, redes sociales y comunicación, como en el caso de la Plataforma Empresarial Digital Analytix que utiliza comScore.

La firma insiste que las empresas deben utilizar métricas para medir, contextualizar y analizar la información que les facilitará definir sus estrategias, lo que debe llevar a aumentar la visibilidad de las marcas y, por esa vía, a incrementar las ventas.