La continuidad de Orlando Cascante como gerente de Radiográfica Costarricense S. A. (Racsa) está en análisis.
El nombramiento de Cascante como cabeza de la empresa estatal venció el pasado 30 de marzo y la junta directiva de la entidad aún no ha tomado una decisión sobre su futuro.
Orlando Cascante asumió la gerencia de Racsa en noviembre del 2011 por seis meses. Su tarea: sanear la crítica situación financiera del Grupo ICE.
Hasta la fecha, la junta directiva ha reelegido al jerarca en su puesto de manera periódica. La última vez fue en enero, en una sesión donde solo participaron dos de los cuatro miembros del órgano.
Según confirmó Mario Zaragoza, vocero de prensa de Racsa, el tema estaba en la agenda de la sesión de hoy de la junta directiva.
“Fue un asunto de agenda (que no se tomara una decisión). A las 4 p.m. no se ha determinado si se discutirá el tema en una sesión mañana”, dijo Zaragoza.
El balance de Cascante es polémico. Racsa registró $6 millones en pérdidas durante el 2012. Sin embargo, en febrero, Orlando Cascante indicó a EF que esta cifra pudo haber alcanzado los $30 millones, si no se hubieran tomado medidas. “Se hicieron ajustes en la organización y se desarrollaron varias acciones para detener la caída. Lanzamos nuevos productos y fortalecimos la conectividad a mayoristas (especialmente cooperativas)”, dijo.
Cascante explicó que se logró reducir el déficit vendiendo parte de la capacidad que Racsa tenía en los cables submarinos.
Otro de los retos que ha enfrentado el gerente de Racsa ha sido poner en operación el proyecto para crear una red ultra veloz, de fibra óptica, simétrica y neutral. La iniciativa se desarrolla con la empresa sueca VíaEuropa y no ha caminado a la velocidad que esperaba la firma estatal por diferencias en el modo de “hacer las cosas” entre los suecos y los ticos.