Una de las grandes realidades que vemos hoy en términos de votaciones, todas las grandes "sorpresas" simplemente, en mi opinión, reflejan una falta de contacto de los expertos, líderes de opinión y teóricos con las grandes multitudes, de manera tal que su lectura de lo que éstas piensan y necesitan no es acertada. La actitud intelectualmente condescendiente, que lleva a minimizar la importancia numérica de quienes piensan diferente, considero que ha tenido como consecuencia una mayor polarización entre quienes se denominan la clase pensante y los demás, ya que abre las puertas a quienes exacerbando las diferencias y odios, capitalizan sobre su comprensión de esos grupos. Recientemente en CR ví el caso de un expresidente y actual precandidato, Jose María Figueres, que tal vez bajó de su pedestal para "ser como los demás" deliberadamente diciendo un exabrupto al aire. Esto es, para mi, una expresión mas de la falta de comprensión de la dinámica de un amplio grupo de la población por parte de quienes pretenden guiarles o gobernarles.
El intelectual Noam Chomsky dijo en una entrevista posterior al triunfo de Donald Trump que "Aparte de los salarios, los beneficios y la seguridad, hay una pérdida de dignidad, de esperanza para el futuro, de la sensación que éste es un mundo al que pertenezco y que yo desempeño un papel que vale la pena". A esto añadiría que lo que se observa es que quienes saben comprender a esos grandes grupos, montan una plataforma "salvadora" conectando con sus miedos, angustias y enojos, reforzándolos y polarizando cada vez mas la sociedad, a través de una fuerte retórica, que no necesariamente se verá plasmada en hechos. Los mensajes claves son muy emocionales y sobre éstos, se construye una promesa que es una mezcla de omisión y distorsión de información, con el ofrecimiento de alguna acción grandiosa y salvadora, que rara vez es realizable con la simpleza que pretenden. Esto lo hemos visto en la elección de Trump vs. Clinton y en otras votaciones como Brexit. Tristemente para ello, en todos los casos hemos visto elevarse la xenofobia, racismo, machismo o alguna otra forma de discriminación.
En el otro extremo están quienes sobreintelectualizan. Quiero compartir en el post de hoy, fragmentos de un escrito del autor del celebrado libro Black Swan o Cisne Negro acerca de los eventos no predecibles, Nassim Nicholas Taleb. En "Intellectual yet Idiots (IYI)" "intelectuales aunque idiotas" (IAI) parte de Skin in the Game, Taleb escribe acerca de "Esa clase de expertos paternalistas semi-intelectuales con algún título de universidad de prestigio (Ivy League)... o una educación similar basada en etiquetas, que nos dicen al resto de nosotros: 1) qué hacer, 2) qué comer, 3) cómo hablar, 4) Cómo pensar ... y 5) a quién votar." Creo que de eso padeció el equipo de campaña de la candidata Clinton al igual que mucha de la prensa que la apoyaba. El mensaje condescendiente, enredado y sobreintelectualizado, difícilmente generará influencia.
Esto aplica tanto para quienes están en el gobierno, como para quienes aspiran al mismo. Cansa y mucho, cuando un gobierno para justificar la inacción y la falta de soluciones, contesta con actitud condescendiente y superior aquello tan trillado de "estamos haciendo con toda seriedad los estudios...blah blah blah". Creo que caen dentro de esta calificación, los burócratas y funcionarios que consideran que al pueblo se le debe mantener sin información, por acción u omisión. Y ello también lo describe Chomsky "A veces la falta de dar explicaciones, en sí mismo una forma de desprecio, desempeña un papel en fomentar el odio al gobierno." Esto lo hemos visto muy claramente en el gobierno del Presidente L.G. Solís en Costa Rica, deliberadamente o no.
Dice Taleb que los IPI "También hablan de democracia, pero se expresan negativamente de quienes no votan como ellos. " Quien es IAI patologiza a otros por hacer cosas que no entiende, sin darse cuenta de que es su entendimiento el que puede ser limitado..." Habla Taleb de quienes componen una élite y hablan de diversidad, mas no se mezclan con gente que no son "como ellos".
Indica Taleb que "Cuando los plebeyos hacen algo que tiene sentido para ellos, pero no para él, el IAI usa el término "personas sin educación". Lo que generalmente llamamos participación en el proceso político, le llama por dos designaciones distintas: "democracia" cuando se ajusta a su pensamiento y "populismo" cuando los plebeyos se atreven a votar de una manera que contradice sus preferencias." Esto lo vemos de manera muy clara por parte de los medios masivos, los que pretenden ignorar lo que se dice en la calle y en las redes sociales. Cada vez mas vemos esa descalificación y ese aislamiento de quienes se supone que entienden a la ciudadanía, llámese políticos, teóricos, periodistas, escritores o "todólogos".
El mensaje llano, simple, memorable, coherente y consistente, conectado con las realidades de muchos, es el que sirve, particularmente en una época saturada de información. Estamos en una época muy difícil, sin esperanzas para muchos, llena de miedos para otros. Cada quien busca lo que mejor le "salve" para sí mismo, su familia y sus seres cercanos, el corto plazo domina mas que nunca al largo plazo.
La tecnología sigue eliminando puestos para personas de bajo nivel de educación, pero los gobiernos y la sociedad, no se apresuran a brindar educación a quienes serán desplazados. Y ello, aunado a la decepción generada por la falsedad y la corrupción, lleva a la desesperanza, muchas veces a la inacción o a la reacción visceral.