
Los empresarios ven un oscuro panorama futuro en los costos y la demanda de electricidad si no se toman acciones pronto para aumentar la oferta de energía a tarifas más bajas.
Empero, el horizonte se nubla más cuando señalan al Poder Ejecutivo por no darle a la problemática energética el lugar que requiere en la agenda nacional. Juan María González, de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), acusó la falta de visión departe de las autoridades para resolver el problema tarifario que enfrentan los consumidores ante el aumento de la energía producida con fuentes térmicas, que elevan los costos.
González y Mario Alvarado, presidente de la Asociación Costarricense de Productores de Energía (Acope), manifestaron que la rectoría del Ministerio de Ambiente y Energía es débil y no alcanza la suficiente potencia para tomar las acciones que necesita el país para hacerle frente a la demanda futura de electricidad.
Alvarado agregó que esa rectoría la ejerce de manera indirecta el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) con una visión limitada a sus planes y no a los del crecimiento del país y de su economía en general.
Ronald Jiménez, presidente de la Asociación Costarricense de Grandes Consumidores de Energía (Acograce), agregó que muestra de la falta de visión para tratar la problemática eléctrica es la decisión de concentrar el 75% de la expansión hidroeléctrica para el 2020 en los proyectos "Reventazón y "Diquis" del ICE, ambos retrasados en sus cronogramas de avance.
Los representantes empresariales afirmaron en un conversatorio con la prensa organizado por la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada (Uccaep), que el país está obligado a duplicar en los próximos 12 años la capacidad del sistema eléctrico para hacer frente a la demanda, sin que se noten por ahora acciones para acometer esa tarea, que tendría un costo calculado en por lo menos $7.500 millones.
Entre las soluciones a corto plazo que los empresarios plantearon para disminuir el impacto en las tarifas que deben pagar los consumidores de electricidad están la definición de un modelo tarifario adecuado donde cada empresa y familia pague según el consumo mensual que realice, sin que los demás actores se vean en la obligación de subsidiar esa factura.
Juan Maria Gónzález considera que es urgente que la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), modifique el modelo de fijación automático de tarifas, que permite cuatro aumentos anuales en la factura eléctrica por concepto de costo de combustibles usados en la generación térmica.
"Eso significaría que en 15 meses la tarifa de electricidad puede subir entre un 40 y un 50%", advirtió el representante de los industriales.
Por su parte Mario Alvarado planteó su preocupación porque mientras el ICE le paga a empresarios privados centroamericanos hasta $0.28 por kilovatio hora, la legislación limita a la entidad autónoma a comprarle más electricidad a los generadores costarricenses, que la ofrecen a precios más bajos, desaprovechando la capacidad de generación hidroeléctrica y eólica que tienen instaladas varias empresas en el país.
Shirley Saborío, directora ejecutiva de Uccaep, puntualizó la preocupación de los empresarios ante el poco avance que han tenido 8 proyectos de ley que se encuentran en la Asamblea Legislativa y que pretenden abordar con carácter de emergencia la necesidad de que más actores privados produzcan electricidad en el país con el ICE como su mayor cliente.