Aunque la calidad del gerente sea el principal empuje para su alto desempeño en el puesto, su oficina puede desempeñar un papel clave a la hora de negociar o tomar decisiones. Esto explica una característica particular de los despachos gerenciales: por lo general tienen una buena vista.
Si bien parece un aspecto puramente estético, arquitectos, sicólogos y diseñadores de interiores coinciden al aceptar la utilidad de un paisaje agradable como parte del espacio, en particular cuando se considera la naturaleza del trabajo del gerente: análisis, desarrollo de estrategias y toma de decisiones.
“El ambiente laboral es de suma importancia para un buen desempeño. Sabemos por experiencia que una buena vista nos permite concentrarnos adecuadamente y reducir el estrés. Hay un buen valor adicional”, explica el sicólogo Luis Raifer, de RyR Consultores.
Por el contrario, una gerencia con cuatro paredes sin ventanas puede aumentar la percepción negativa al enfrentar dificultades, sobre todo en jornadas largas de trabajo.
Espacio pacífico y acogedor
Para el arquitecto José Luis Salinas, presidente de Arquitectura y Diseño, una oficina de gerente debe ser un espacio que ayude a bajar la tensión de las tareas diarias. “Debe tener buena vista y mucha luz natural, además de contar con espacios agradables para conversar, reunirse e interactuar, sobre todo si es una gerencia general”, comenta.
Por esto, la ubicación es clave a la hora de diseñar el espacio. La arquitecta Adriana Serrano, de Robles Arquitectos, hace énfasis en ese punto. “Analizamos cada uno de los espacios para poder brindarle vistas, ventilación y luz natural a las oficinas de altos mandos, debido a las consecuencias positivas que generan”, asegura la profesional.
El impacto real de estos factores está mediado por el estilo de liderazgo del gerente, y esa es la experiencia de Jean-Luc Rich, gerente general de Scotiabank, quien disfruta vistas desde diferentes puntos de su oficina en La Sabana, pero aún cuando la situación sea tensa, el espacio físico puede aportar a disminuir la tensión.
“La oficina tiene efecto en las relaciones. Piense en un escritorio colocado contra la pared y sus consecuencias en el ánimo. Lo contrario también sucede”, detalla la diseñadora de interiores Michelle Guardia.
Para el sicólogo Raifer, se debe descartar la creencia de que el trabajo da resultados aunque las condiciones físicas no sean las mejores, o que no es prioritario invertir en mejorar los espacios.
“El ambiente físico debe ser considerado como de suma importancia para obtener rendimientos, porque incide positivamente en una menor acumulación de estrés”, dice el sicólogo.
Área creativa
Si bien las ventanas también han sido catalogadas como elementos distractores, sus ventajas sobrepasan por mucho ese riesgo. Además, muchas veces la respuesta creativa o innovadora a una situación particular puede venir del entorno.
“Steve Jobs siempre propició en Apple un ambiente con ventanas grandes, mucha luminosidad y espacios abiertos, para la generación de ideas”, subraya Orlando Uriza, sicólogo laboral y profesor del Instituto de Estudios Empresariales.
El intercambio entre el gerente y su equipo es fundamental. Salinas asegura que por esto “la oficina debe ser un lugar donde toda persona de la empresa se sienta cómoda, no debe ser intimidante. Muchas veces el gerente general tiene que resolver problemas en ese espacio y sin importar quién entre, ahí se debe generar un ambiente de comodidad y tranquilidad, así todo el personal trabaja con mayor productividad”.
Con esto en mente queda claro que el despacho debe hacer un uso eficiente de los recursos y muchas veces su diseño es parte de un concepto integral para todo el edificio o las oficinas principales.
Si una de esas es la suya, sáquele provecho a sus condiciones laborales, tómese el tiempo para relajarse, apreciar el espacio y compartirlo: lleve las reuniones breves a su oficina, conviértala en uno de sus recursos para el éxito.
Activo valioso
La vista, como cualquier otro factor que añada espacio, aumenta el valor económico de una oficina, incluso si en lugar de un paisaje da a un jardín.
El efecto sicológico es muy grande, pues además de facilitar el ambiente relajado, comunica estatus a quienes visitan ese espacio.
Una oficina con pocas ventanas puede provocar con el tiempo una sensación de encierro y existe una posibilidad mayor de hace sentir acorralados a quienes deben reunirse con el gerente en ese lugar.
La luz natural ayuda a trabajar mejor, pues disminuye el esfuerzo visual, siempre que no choque con el monitor de la computadora.
Fuente Michelle Guardia, decoradora de interiores.
Con un sello muy personal
Jean-Luc Rich, gerente general, Scotiabank
- De acuerdo con su experiencia, ¿hay algún beneficio para el gerente que cuenta con una buena vista en su oficina?
Ocupé oficinas con vistas muy buenas, como la que ocupo aquí en Sabana, y también conté con oficinas con mala vistas, pero lo más importante para mí es acondicionar la oficina con elementos personales como fotografías, recuerdos, etc., que me hagan sentir “en casa”.
- ¿Es importante que la oficina del gerente provea un ambiente diferente y confortable para reuniones con subalternos y con pares?
Sin duda, una oficina austera no ayuda a la comunicación. Sin embargo, desde mi punto de vista es la persona que ocupa la oficina la que genera el ambiente y no la decoración en sí. Un ambiente confortable empieza con una oficina que mantiene sus puertas abiertas. El diálogo abierto empieza con esa invitación.
- ¿Es verdad que el gerente puede sacar provecho para su salud mental de una oficina con una vista agradable?
Depende de cada gerente. En mi caso, objetos familiares son suficientes para sentirme a gusto. Además, mucho se gana justamente al salir de la oficina y compartir con los colaboradores en sus propios lugares de trabajo.