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De los ocho años de existencia que tiene el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) de EF, el 2012 fue el segundo en el que el indicador demostró desconfianza en los 12 meses consecutivos del calendario.
De esta manera, el año pasado se resume en que el consumidor estuvo pesimista con respecto a las condiciones económicas y que ese sentimiento se mantuvo en el tiempo.
Esa mala espina no es tan grave como en otras ocasiones, pero fue estable.
Incluso, el 2012 también fue comparativamente más estable que otros años, es decir, no hubo variaciones violentas en el Índice.
Para diciembre pasado, el ICC tuvo un valor de 4,5 puntos de una escala que va de 0 a 10, fue el segundo valor más alto del año pasado, pues en enero alcanzó 4,8 y desde entonces cayó paulatinamente.
En el último trimestre, el indicador tuvo una tímida recuperación.
EL ICC es elaborado mensualmente por la empresa Unimer para EF y mide, mediante una encuesta, la percepción de la situación económica de las personas que se encargan de aportar los recursos a los hogares.
Un año sin sorpresas
En los 12 meses anteriores no hubo sobresaltos en el indicador, ni para abajo, ni para arriba, en la curva que muestra la evolución.
El menor valor fue de 4,1 puntos entre mayo y junio. Este no es el puntaje más bajo que se ha alcanzado, pues, en el 2008 y en medio de una crisis económica global, llegó a 3,6 puntos.
Al medir el movimiento del Índice es posible determinar que las variaciones promedio fueron de un máximo de 0,21 con respecto al punto medio, un valor muy similar al comportamiento que hubo en el 2010.
En el otro extremo, el 2008 fue uno de los periodos más volátiles, pues el movimiento promedio era de casi un punto.
Valeria Lentini, directora regional desarrollo de Unimer, explicó que actualmente no se esperan variaciones o cambios abruptos del ICC.
Por un lado, el país no viene saliendo de una crisis económica como para que ocurra un impulso hacia arriba en la confianza. Tampoco la economía y las condiciones generales están absolutamente deterioradas para motivar una caída vertiginosa de la confianza, explicó.
El ICC es comparable con los diferentes resultados de la economía nacional del 2012, que para octubre pasado tenía un ritmo de crecimiento leve y una desaceleración de algunos sectores.
En la pasada encuesta de EF realizada a economistas y publicada el 17 de diciembre, los especialistas calificaron el 2012 como un año sin pena ni gloria.
Sectores como la manufactura y el comercio, medidos por el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) cerraron en octubre con una tendencia a la baja.
Lo anterior coincide con el ánimo de los consumidores para hacer compras de artículos grandes (lavadoras, refrigeradoras y otros), donde una mayoría cree que es un mal momento y el promedio de todo el año reflejó un aumento con respecto a periodos anteriores.
Juan Carlos Crespo, gerente general de Tienda La Gloria, coincidió con la medición al decir que el 2012 les había dado un crecimiento en los ingresos, pero muy diferente a los de hace muchos años en los que lograban aumentos porcentuales de dos dígitos.
Según Crespo, el 2012 fue muy similar al año antepasado, pero esperan buenos resultados para el 2013. Aseguró que tienen confianza para reforzar su actual operación en la Avenida Central y descartó medidas asociadas a una contracción.
