En Costa Rica, se han identificado 233 franquicias nacionales y extranjeras y solo 16 son pequeñas y medianas empresas, según datos de la Cámara de Comercio.
Sin embargo, Karol Fallas, directora del Centro Nacional de Franquicias de la Cámara, afirmó que el modelo es una alternativa rentable para el pequeño empresario, siempre y cuando se haga con acompañamiento.
¿Son las franquicias el negocio idóneo para una pyme?
Es uno de los medios, principalmente cuando las pymes empiezan a tener dificultades para crecer, para pedir crédito o encontrar un socio, porque no encuentran una persona que crea en lo que está haciendo.
“Ahí es donde vemos que sí es una oportunidad rentable porque se trabaja con recursos que aportan terceras personas.
“La pyme puede decidir convertir su negocio en una franquicia o comprar una ya existente.
“En el primer caso tiene que prepararse y formalizar la estructura, no es solo hacerle un contrato a un tercero para que opere la marca, debe establecerse estándares y líneas base.
“Es clave que el producto o servicio que se franquicie tenga algún grado de innovación para ser atractiva para el tercero.
“La otra alternativa es que yo compre una franquicia para iniciar el negocio”.
¿Cómo sabe la pyme si para ella es mejor comprar una franquicia o crear una?
Depende de los intereses del empresario y de lo que haya investigado en el mercado.
“Si ya tiene una idea, tiene que ver si es factible, si es llamativa, si hay mercado y si despierta el interés de un tercero.
“Cuando se compra una franquicia, ya tiene esa parte de difusión hecha. En este caso, es importante traer un concepto ya posicionado”.
¿Alguna de las dos alternativas es más fácil o menos costosa?
Estadísticamente es menos riesgoso comprar una franquicia que crear una.
“El acompañamiento que le da el franquiciador marca una diferencia y ayuda a mantener los estándares.
“La capacitación, el seguimiento y la guía la aporta el franquiciador, al igual que la renovación y el proceso de cambio.
“Es como cuando el niño comienza a caminar. El franquiciador lleva de la mano al pequeño empresario hasta que esté listo para hacerlo solo”.
El 72% de los empresarios que invierten en una franquicia extranjera tienen un retorno de su inversión en un tiempo menor a los cuatro años, ¿dónde está el éxito?
La clave está en la ventaja del modelo, cuando yo compro la franquicia ya conocen la marca y ya tengo terreno ganado.
“Por esa razón es que los datos nos indican que es menos riesgoso comprar una franquicia que crear una.
En Costa Rica, solo 10 de las 44 franquicias locales han expandido su negocio al exterior. ¿Qué le indica al empresario si a su franquicia le llegó la hora de salir del país?
Hay que revisar cuánto más puedo crecer y si ya el mercado tico está saturado, debo pensar en salir. Pero eso solo se sabe si se conoce muy bien el mercado.
“Por eso, aunque sea costoso, es muy importante invertir en un estudio de mercado antes de tomar cualquier decisión.
“Además del estudio, el principal indicador que le puede guiar es si hay o no mercado en el país.
“Si se toma la decisión de cruzar las fronteras, una opción es participar en ferias y hacer contactos primero antes de salir a probar suerte.
“Lo usual es que el dueño de la franquicia es el que empieza la expansión y cuando se estabiliza delega, por lo que también debe contemplarse ese recurso”.
Si soy una pyme, posiblemente no tengo los recursos para costear un estudio de mercado, ¿qué hago?
Hay algunos sectores que tienen sus propios estudios de mercado, como la Cámara de Comercio. También hay estadísticas que se pueden usar para entender un sector, como las del Banco Central o las del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC).
“Pero siempre sería bueno tratar de costear un estudio, al menos uno básico.
“Estos datos son importantes porque el franquiciador debe garantizar que su franquiciado tenga los recursos para operar.
“Yo tengo que ver la franquicia como una red, si a uno le va mal, a todos nos va mal”.
¿Sería recomendable para una pyme iniciar una franquicia primero en el exterior y luego traerla al país?
Se puede dar de esa manera, pero es más complicado darle seguimiento y conocer el mercado; prácticamente el empresario tendría que trasladarse a ese nuevo mercado.
“Lo mejor es abrir primero en Costa Rica, ganar experiencia y entender el modelo antes de salir”.
¿Recomienda usted iniciar un negocio y convertirlo en franquicia inmediatamente?
Algunos empresarios prefieren abrir el negocio para franquiciar, se conciben así desde el inicio.
“Sin embargo, yo recomiendo tener al menos un año de operación antes de franquiciar.
“Ya en un año vi el ciclo del negocio y tengo la capacidad de transmitir esa experiencia a un tercero.
“Además, si no le demuestro al posible inversionista que mi negocio es rentable, será mucho más difícil de vender”.
De las 233 franquicias que existen en Costa Rica, solo 44 son nacionales, ¿es un modelo poco atractivo?
No lo creo. No teníamos estudios de mercado, no había información ni apoyo, es hasta ahora que el empresario nacional comenzó a entender que, no solo puede comprar una franquicia, sino también puede crear una.
“Nosotros como Centro Nacional de Franquicias empezamos hace cinco años. Los empresarios nacionales no tenían la noción de seguir creciendo cuando ya no tenían recursos.
“Costa Rica es un mercado incipiente, toma de 10 a 15 años madurar un mercado”.
¿Cree usted entonces que se volverá una moda?
Todavía los empresarios no tienen claro cómo opera el modelo, quieren comprar una franquicia y no saben ni de qué ni cuánto puede o tienen que invertir.
“Hay gastos antes de empezar que no se contemplan, como la compra de la franquicia, la protección de marca y el retorno de la inversión, entre otros.
“Todavía tenemos mucho que madurar”.
Nombre: Karol Fallas Estrada
Formación: Máster en administración de empresa con énfasis en finanzas
Edad: 30 años.
Estado civil: Soltera.
Trayectoria profesional: Directora del Centro Nacional de Franquicias, Cámara de Comercio