
Son frutillas pequeñas, ácidas y en el supermercado comienzan a mezclarse con frutos tradicionales como el jocote y el mamón.
El arándano y la uchuva son frutos de la familia de las bayas ( berries , en inglés), que han tomado auge en el mercado costarricense los últimos cinco años, tanto en su presentación fresca como en productos derivados como jaleas. Ambos son naturalmente ácidas y proviene de arbustos pequeños de clima frío.
En su gran mayoría, el arándano es importado de Chile, Estados Unidos y Perú; mientras que la uchuva es de producción local.

Su auge se debe a las propiedades medicinales y nutricionales que brindan, como los altos contenidos de vitamina C y su capacidad para combatir algunas enfermedades.
Para ambos frutos existen proyectos experimentales para fomentar el cultivo en suelo nacional y mejorar las variaciones existentes.
Antioxidante natural

El arándano es un fruto de zonas altas que tiene propiedades antioxidantes y diuréticas.
La mayor parte del que se consume en Costa Rica proviene del exterior.
Según datos de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), del 2009 al 2013, la importación de este fruto se incrementó casi cinco veces.
Vivian Fonseca, ejecutiva del departamento de Mercadeo de Automercado, confirmó que han registrado un aumento en las ventas de arándano los últimos tres años y ahora son un producto que ofrecen de manera fija.
“Una de la razones del aumento de las ventas es porque nuestros clientes piensan mucho en su salud y el bienestar, buscan estos productos por la gran cantidad de antioxidantes que tienen”, externó Fonseca.
Junto con el fruto fresco, también comenzaron a ingresar al país derivados como jugos, jaleas, vinos, salsas y medicamentos naturales a base de esta baya.
Solo en jugos, por ejemplo, están las marcas Ocean Spray, GNC, Del Valle, Sonrisas, Lio té y Old Orchard, entre otras.
La Estación Experimental Fabio Baudrit Moreno de la Universidad de Costa Rica (UCR) está desarrollando el proyecto “Mejoramiento genético de frutales para las zonas altas de Costa Rica” con el objetivo de impulsar el cultivo local de varios frutos, incluido el arándano.
Su coordinadora, Patricia Quesada, explicó que este fruto es uno de los cultivos más promisorios con los que se trabaja y es el que ha mostrado mejores resultados en el proyecto.
Esta iniciativa comenzó hace dos años y durante este tiempo han estudiado las variedades existentes en el país, su adaptación y su capacidad productiva.
Existen cinco variedades sembradas en la Finca Fraijanes en Alajuela, que es parte de la Estación Experimental.
Desde hace dos años se importan también desde Estados Unidos algunas otras variedades que serán probadas bajo las condiciones del clima de Costa Rica.
“El aumento en el consumo de productos altos en antioxidantes es una tendencia mundial ya que la principal preocupación de las personas es la salud”, externó Quesada.
El fruto del amor
Envuelto en una flor que parece de papel y conocido como fruto del amor, la uchuva se cultiva hace varios años en el país, aunque su difusión comercial apenas comienza a notarse.
La Fundación para el Fomento y Promoción de la Investigación y Transferencia de Tecnología Agropecuaria de Costa Rica (Fittacori) cuenta con el proyecto “Frutales de clima frío”, donde se estudian variedades de tomate de árbol, melocotón, ciruela, arándano y uchuva.
Uno de los investigadores, Iván Calvo, explicó que el objetivo es evaluar estos frutos desde el punto de vista agronómico y mejorar su calidad para tratar de venderlos procesados.
La uchuva es de origen suramericano. En Costa Rica, las plantaciones se concentran en varias zonas de Cartago, principalmente Pacayas, pero son aisladas. También se han visto de manera silvestre a orillas de la carretera en zonas altas de Los Santos.
Uno de los productores a pequeña escala es la Finca Ecológica Tierra Verde, ubicada en Cervantes de Cartago, quienes la venden como fruta fresca.
Por su parte, la Asociación de Productores de la Cima, que agrupa a pequeños empresarios y agricultores en Dota, le sacan el mayor provecho en la presentación de jalea.
El jugo de esta fruta madura tiene altos contenidos de pectinasa –moléculas que en presencia de agua generan geles–, lo que disminuye los costos en la elaboración de mermeladas y otros preparativos similares.
El hecho de que no existen cultivos a grandes escalas hacen que la presencia de la uchuva en los supermercados y ferias del agricultor sea intermitente; sin embargo, hace pocos años era prácticamente nula.
“Se le ha dado poca importancia y casi no hay siembras comerciales, no se consigue fácilmente y estamos tratando de mejorar eso”, manifestó Calvo.
Es un fruto que posee altos niveles de vitamina A y C, así como calcio, fósforo y hierro. En diferentes regiones de Colombia (el mayor exportador del mundo) se le atribuyen propiedades medicinales tales como las de purificar la sangre, disminuir la albúmina de los riñones y prevenir la osteoporosis, según información del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Uchuva
Datos de la FAO indican que se utiliza como diurético y antiasmático.
El fruto sirve para purificar la sangre, ayuda a eliminar la albúmina de los riñones, reconstituye el nervio óptico, limpia las cataratas.
También contribuye contra la diabetes, la artritis incipiente y alivia eficazmente las afecciones de la garganta.
Arándano
La Biblioteca de Medicina de Estados Unidos indica que el arándano se utiliza para la prevención de las cataratas y el glaucoma.
Se suele recomendar para el tratamiento de infecciones del tracto urinario, de la esclerosis múltiple (EM), del síndrome de fatiga crónica (SFC), de cólicos y de la fiebre.