1. ¿Es tiempo de establecer alianzas?
En época de desaceleración económica, analice con lupa la opción de realizar una alianza estratégica con otra empresa. Pregúntese si este bajo ritmo económico será duradero o si puede cambiar en dos años. ¿Para qué quiere la alianza? Si es para bajar costos o crecer en el mercado el paso será bueno en cualquier momento. La desaceleración implica reducir costos.
Analice cómo se comporta su actividad económica. Por ejemplo, actualmente agricultura, construcción y comercio se contraen en Costa Rica, pero manufactura, servicios crecen. Además, si necesita asociarse para acceder a tecnología con la que no cuenta, dé el paso.
2. ¿Cómo diferenciar el negocio?
Antes de pensar en qué diferencia a su proyecto o empresa de la competencia, conozca cuál consumidor quiere atender. Con esto claro, afine los elementos que potenciará en el mercadeo de su empresa.
La tecnología es positiva para los procesos de las compañías, pero avanza tan rápido que los diferenciadores basados en ella tienden a durar poco.
“Las marcas distintivas hoy en día no son solo aquellas que tienen productos o servicios distintivos, sino aquellas que tienen un propósito claro y saben comunicarlo a sus clientes”, dijo Ramiro Casó, psicólogo especializado en Marketing e investigador de INCAE Business School.
Un negocio con propósito, según la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), es aquel que incorpora un aporte social y ambiental en su producción.
Apueste por brindar experiencias únicas y personalizadas para cada consumidor, mediante el análisis de datos del comportamiento de consumidores y competidores.
“Las tecnologías propietarias se copian rápidamente y la innovación es cada vez más difícil de alcanzar. Lo que queda para competir es poder ejecutar con la máxima eficiencia y efectividad, y poder tomar las decisiones de negocios más inteligentes", señala Thomas Davenport, profesor de Babson College y autor del libro Competing on Analytics.
Mida todo lo que pueda. Mientras más cerca esté de la conducta de compra, mejor satisfacerá las necesidades de sus clientes y potenciales compradores.
Responda al menos ¿cuántas personas ingresan al sitio web y cuántas a su local físico?, ¿cuántos compran y cómo lo hacen?, ¿quiénes hablan de la marca y qué se dice?
La clave para dar valor agregado a la empresa son los datos y su correcto análisis, y quienes no apuesten por este camino están perdidos, aseguró Casó.
3. ¡Aproveche los nuevos impuestos y ponga en orden sus cuentas!
Las nuevas formas de declarar los impuestos son una oportunidad para que las empresas y los emprendedores pongan en orden sus cuentas. A los empresarios se les recomienda prudencia; es decir, tener control de sus gastos, una sana política de presupuesto y mucho orden administrativo.
Las inversiones deben ser estratégicas para procurar un rendimiento mayor al de los costos. Mientras que para los emprendedores la mejor práctica es conocer el mercado, buscar nuevas oportunidades y conversar con sus clientes.
Para la declaración del impuesto sobre la renta los contribuyentes deben tener presente varios cambios.
Con la entrada en vigencia del impuesto sobre rentas de capital y ganancias de capital algunos ingresos (como alquileres o ganancias por la venta de inmuebles) no estarán sujetos al impuesto sobre la renta, por lo que en la declaración se deben excluir estos ingresos.
Mientras que el 2020 será de transición porque se migra a un periodo fiscal que cerrará en diciembre, por eso se deben de incluir ingresos para más meses. ¡Revise que su contabilidad esté preparada para esta transición!
4. Amplíe los horizontes de sus exportaciones
Toda empresa exportadora debe buscar cómo diversificar los destinos de sus exportaciones en momentos de incertidumbre económica y más aún si la empresa depende de un solo mercado.
Esta saludable práctica permitirá extender el ciclo de vida del producto por lo que los especialistas recomiendan hacer una búsqueda activa.
A la hora de analizar un potencial destino se deben tener en cuenta las importaciones de al menos los últimos cinco años, los gustos y las preferencias de los consumidores, la cantidad de potenciales compradores y si existe algún tratado de libre comercio que brinde preferencias arancelarias.
Las empresas pueden solicitar el acompañamiento de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer) o de la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco), entidades que brindan asesorías para colocar productos fuera de las fronteras costarricenses.
5. Saque provecho de 14 tratados de libre comercio
Exportar y diversificar mercados es una buena opción en momentos donde la economía crece poco, si una empresa valora la idea por primera vez, las mejores experiencias surgirán en los mercados regionales. Esto le permitirá desarrollar mayores conocimientos sobre trámites, ajustes en procesos logísticos y maximizar la estructura de costos.
En este momento se puede sacar provecho de los 14 tratados de libre comercio que el país tiene a destinos como la Unión Europea (UE), la Asociación Europea Libre de Comercio, Centroamérica, Canadá, países del Caricom, Chile, China, Colombia, Estados Unidos, México, Panamá, Perú, República Dominicana y Singapur.
Las ventajas que ofrecen los acuerdos comerciales son variadas, ejemplo las preferencias arancelarias.
Durante el 2018, 2.145 empresas realizaron transacciones de productos a 155 mercados alrededor del mundo. El 44% tuvo como destino América del Norte, el 21% América Central y el 21% la Unión Europea, según datos suministrados de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).
Los empresarios que deseen exportar hacia el Caribe deben realizar un estudio de acceso al mercado, revisar los acuerdos comerciales, sondear los precios y participar en ferias.
El Caribe es un destino muy diverso donde se habla español, inglés, francés y neerlandés, por lo que es importante tener estas consideraciones para realizar las negociaciones y las etiquetas de los productos.
“Todos estos acuerdos pueden ser aprovechados por las empresas costarricenses para aumentar su competitividad en las exportaciones a estos destinos, una vez se hayan adoptado las recomendaciones sobre la investigación previa de los mercados, prospección del consumidor y consideraciones logísticas para el envío”, Pedro Beirute, gerente general de Procomer.
6. Aproveche Internet y otros servicios para ahorrar y acercarse a su mercado
Al revisar los servicios de telecomunicaciones, mantenga un equilibrio entre cómo generar ahorros y cómo aprovechar Internet, la telefonía y las aplicaciones para acercarse a sus clientes.
La generación de ahorros exige medidas que van desde concientizar a los colaboradores sobre el uso de las telecomunicaciones en el negocio, establecer controles y medidas de seguridad para evitar el hackeo telefónico, y utilizar la telefonía IP, mensajería, chats y conversaciones vía Hangouts o Skype para comunicaciones internas.
Para la optimización de operaciones se pueden utilizar servicios de videovigilancia, automatización de recursos (luces, aires acondicionados) y de computación en la nube los cuales puede ampliar o reducir según la demanda.
Gerardo Chacón, director general de Telecable, recomendó prever desde el inicio las variables para afrontar cualquier incremento en los costos y evitar reprocesos.
Los operadores insisten que la tercerización de los servicios de telecomunicaciones genera ahorros, optimiza las operaciones y permite enfocarse en el nicho de mercado de la empresa.
Germán Sánchez, director de la unidad de infraestructura de telecomunicaciones del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), recuerda efectuar análisis predictivos y correctivos de los requerimientos en este campo para realizar ajustes a las necesidades y no estar pagando por capacidades sobredimensionadas o experimentar falta de recursos.
La seguridad de la información y de las telecomunicaciones es clave para evitar gastos imprevistos o que terceros usen sus líneas con fines ilícitos, como en el hackeo telefónico donde las bandas ingresan a su central para utilizarla en el comercio de llamadas en distintos continentes.
7. Use los servicios de la nube
Aunque las desarrolladoras todavía ofrecen sistemas informáticos a través del modelo de licenciamiento (on premise), la tendencia es cada vez más a servicios de computación en la nube a nivel de infraestructura, plataformas y aplicaciones.
En el caso de la infraestructura se recurre a firmas que proveen equipos, redes informáticas, bases de datos y almacenamiento de acuerdo a los requerimientos.
Cuando se trata de las plataformas, estas sirven para desarrollar con rapidez las aplicaciones con herramientas y sistemas de desarrollo, sin necesidad de extensos procesos de diseño y desarrollo, y con menores costos.
En caso de las aplicaciones se utilizan software que las firmas tecnológicas ponen a disposición a través de Internet: desde sistemas de correos electrónicos a sistemas de ofimática y operativos, atención de clientes e incluso soluciones gerenciales (tipo ERP, CRM y otras).
Aparte del costo según el uso de los recursos o por suscripción, la computación en la nube permite actualizaciones, soporte y asistencia técnica, así como modificaciones según la demanda. Considere únicamente que debe contar con sistemas de seguridad y banda ancha para disponer los servicios sin inconvenientes.
8. Automatice y digitalice
Automatice y digitalice tareas repetitivas.
“La automatización reduce tiempo, proporciona agilidad, brinda disponibilidad permanente, elimina errores y libera personal para labores donde se requiere criterio humano, iniciativa y creatividad”, dijo Cecilia Collado, gerente regional de soluciones de ingeniería de GBM.
La ventaja es que la tecnología para automatizar y digitalizar está disponible en la Nube: sistemas de automatización robótica de procesos, inteligencia artificial y aprendizaje automático, entre otras.
“La prioridad principal de las empresas no debe ser solo la reducción de costos, sino estimular el crecimiento y la diferenciación”, dijo Ignacio Pérez, socio de consultoría de PwC.
Para evitar recargos y gastos inesperados defina un mapa de ruta de cambio recurriendo a estándares y a las mejores prácticas, metodologías ágiles en desarrollo, métodos de usabilidad y experiencia de usuario y enfocándose en los clientes.
Garantice los recursos tecnológicos necesarios para la operación e identifique oportunidades de mejora.
“Se requiere estar preparado y hacer los ajustes necesarios en el rumbo para poder crear el futuro”, afirmó Renato Rivera, director de Impetus International.