La pintura de Fernando Botero titulada Hombre yendo a la oficina se vendió el miércoles en Nueva York en $1.445.000.
El cuadro de 1969 no superó la marca de hasta $1,8 millones que había pensado la casa de subastas Christie's, pero se ubicó dentro de su estimado.
Con sus 188 x 188 centímetros, Hombre yendo a la oficina aborda uno de los temas más importantes para Botero: la familia.
“Aunque es una imagen aparentemente idílica de abundante armonía doméstica ... lo convencional se vuelve extraño a través de las manipulaciones de proporción radicales del artista”, dijo Christie's en un comunicado.
“Aquí, el esposo es empequeñecido por sus colosales esposa e hija, que parecen demasiado grandes para su bien amueblada casa, que irónicamente es apenas contenida por el amplio espacio del lienzo extragrande”, detallaron.