La producción industrial china creció un 8,6% en enero y en febrero respecto al año anterior, anunció el jueves la Oficina Nacional de Estadísticas.
Esta subida es la más débil desde abril de 2009, según la oficina de estadísticas, y se sitúa por debajo de las previsiones de los analistas preguntados por la agencia Dow Jones, que esperaban una media del 9,5%.
Durante el periodo de enero-febrero, las ventas al por menor progresaron por su parte un 11,8% respecto al año anterior, un porcentaje también por debajo de las previsiones de los analistas (13,5%), y el más bajo en tres años.
Por su parte, las inversiones en capital fijo crecieron un 17,9%, de nuevo, por debajo de lo esperado por el mercado.
Estas estadísticas, que habitualmente se publican a ritmo mensual, cubrían de forma excpecional los dos primeros meses de 2014, para tomar en cuenta las distorsiones provocadas por los feriados del Año Nuevo lunar, que se iniciaron a finales de enero.
Estos nuevos datos siguen la publicación de una serie de indicadores que han avivado las preocupaciones sobre la desaceleración de la segunda economía mundial.
Así, la producción manufacturera china registró en febrero su mayor contracción en siete meses, según el índice publicado por el banco HSBC, y en febrero el déficit comercial alcanzó los 22.980 millones de dólares.
Pekín anunció la semana pasada que mantenía su objetivo de crecimiento económica del 7,5% en 2014, el cual sería su crecimiento más bajo en casi un cuarto de siglo.
En 2013, el crecimiento fue del 7,7%, una cifra estable repecto a 2012, cuando registró su nivel más bajo en 13 años.