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La historia se repite una y otra vez a nivel personal, en las pequeñas empresas y en las grandes corporaciones: estancamiento, terror a iniciar un nuevo proyecto que signifique una innovación y miedo casi paranoico al riesgo. Llega alguien –ojalá un exempleado-, lanza un producto o servicio e inicia una revolución en el mercado.
Clásico. “Las decisiones audaces que alteran el statu quo son el combustible de la innovación”, dice Nadie Goodman, fundadora de YouBeauty.com y psicóloga graduada en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos.
Goodman agrega que quien aprende a abrazar opciones fuera de su zona de confort es capaz de empujar el mercado, sobresale y triunfa, de una forma que los empresarios y gerentes que están seguros en su sitio no pueden.
¿Las claves?
Siéntase incómodo
Si a su alrededor hay gente que se siente cómoda con lo que hace y si Usted también se encuentra en esa situación no podrá tomar riesgos.
El consejo de Goodman es “siéntase incómodo” y estará en mejores condiciones para evaluar las opciones de riesgo, así como tendrá menos probabilidades de resistirse ante la innovación.
No dude que quienes critican sanamente y quieren salirse de la situación de confort en su compañía o en su familia también le serán de mucha ayuda. Los que se sienten conformes, ahí seguirán en el mismo lugar. ¡Qué pereza!
Analice los escenarios
No se trata de ir a ciegas. Analice los posibles escenarios en los que podrá encontrarse. Claro que tomar riesgos en su negocio lo pone siempre frente a la posibilidad del fracaso.
Pero deberá saber tomar esos riesgos y fomentar la creatividad y la innovación mediante la apertura a nuevas ideas y practicar las habilidades para prepararse a dar forma a una idea descabellada y hacerla brillante.
Pase en medio de lo que ocurre, no en el fondo
No se encierre en su cargo ni en su oficina al fondo de la empresa. Vaya al mostrador, póngase en lugar de la recepcionista, ubíquese junto a la puerta de entrada.
Al trabajar con la puerta cerrada y en su escritorio simplemente se está congelando en su espacio seguro, de confort, donde pasa la rutina y donde no ocurre nada. Rompa el molde, salga de la cascara. Vea a su empresa desde una perspectiva diferente para encontrar nuevas ideas.
Reconozca nuevas ideas
No se autoproteja ni permita que lo protejan de las críticas de proveedores, socios, colaboradores y clientes. Estimule el desarrollo de espacios informales y formales para ver lo que funciona y lo que no está operando bien.
Trate de responder las preguntas y escuche las críticas con una mente abierta. No es necesario complacer cada intervención solo para agradar y escabullir los dardos; concéntrese y reconozca las ideas útiles que le están aportando en medio de la tormenta.
Maneje el cambio y la incertidumbre
Maneje la resistencia al cambio y el pavor a la incertidumbre. No se puede sofocar ni eliminar ese miedo, pero se puede gestionar positivamente para su negocio como un sano mecanismo en el funcionamiento saludable de la empresa.
Averigüe la causa de la resistencia, aconseja José Vicente Losada, un especialista en este tipo de situaciones. Véala como una oportunidad de retroalimentación y de aprendizaje para el proceso mismo de cambio, de aprovechamiento de la energía a favor del crecimiento y la transformación.
Maneje la resistencia
La resistencia coexiste con el ánimo de cambio y esto es natural, pero puede paralizar la innovación de productos, servicios y procesos en la empresa. El cambio per se puede llevar a la empresa a aventurarse sin prever los escenarios.
La empresa debe tener un manejo equilibrado del cambio y la resistencia, enfocándose en los aspectos positivos -y no tanto en los negativos- de la resistencia.
Alinear el talento
Buena parte de la resistencia al cambio es la falta de confianza en el talento. Una tarea imprescindible es reconocer las competencias que se requieren y las existentes en la empresa, para alinearlas y poder responder con las capacidades disponibles a los nuevos retos.
Eso sí, la empresa como un todo debe reconocer el talento que posee y que sí es posible avanzar a partir de su propio potencial. La conciencia de sus posibilidades posibilita dar los pasos al cambio.
Se debe propiciar un ambiente donde los colaboradores manifiesten su resistencia en forma de conflictos funcionales, o desacuerdos, para generar retroalimentación, aprender colectivamente y producir energía movilizadora.
¿Mantendrá el modelo de obediencia?
Los especialistas en la teoría de la administración recalcan que el modelo de gerencia actual es heredero de la era industrial, donde prevalecen la obediencia y la diligencia, al punto que se considera la disciplina como una condición esencial para las empresas. No era un modelo pensado para crear entornos de innovación.
Hoy se requieren empresas ágiles en las que la innovación sea el trabajo de todos, mediante la colaboración y redes de relaciones, a nivel de planificación estratégica, gestión de presupuestos, gestión de proyectos, atracción y retención de talento, evaluación del desempeño, mercadeo, distribución, diseño y relación con los clientes.
Tenga una estrategia para introducir la innovación
La innovación requiere visión y un plan estratégico que permita la introducción de prácticas de colaboración y de nuevas formas de operar. Los especialistas recuerdan que “si siempre hace lo que ha hecho, conseguirá lo que siempre ha conseguido”.
La estrategia debe implicar la creación de una cultura que cuestione el statu quo, buscando nuevas formas de operar, explorando nuevas vías, evitando respuestas fáciles a los problemas, construyendo la capacidad para experimentar y brindando nuevas oportunidades a las nuevas ideas. La clave es cuestionar, siempre.