Desde Ámsterdam, hasta Sídney, pasando por Washington y haciendo otra parada en La Sabana, Pokemon Go va invadiendo el mundo.
Basta con ver a los miles de usuarios que sin importar su nacionalidad, lenguaje y costumbres caminan por las calles con la nariz pegada a la pantalla de su celular en busca de un pokemon .
Ya sabemos que este juego ha sobrepasado límites y nos muestra que la realidad aumentada está más presente que nunca.
Dejando de lado las locuras que han ocurrido por este juego, y que tal vez para muchos no tiene sentido que se le dé tanta importancia mediática; yo lo veo de otra manera: cómo Nintendo logró salir de las cenizas y elevar abruptamente el valor de sus acciones entrando en un nicho que tenía olvidado como los juegos en móviles.
Con una aplicación que revive a una de las series más populares de los 90, Nintendo logró que sus acciones en la bolsa de Tokio se dispararan más del 70% en las últimas semanas.
Toda una jugada maestra, porque quien desarrolló esta aplicación fue el estudio Nantics, asociado a la empresa Pokemon Company y que a su vez es una afiliada a Nintendo. ¿Inteligente?
La empresa que le dio vida a Super Mario Bros y a Donkey Kong tuvo sus años dorados, pero en los últimos años Sony con su Play Station y Microsoft con Xbox tenían en el suelo a este pionero de los videojuegos.
Nintendo no solo ganó en términos monetarios, sino que también se abrió paso en el volátil nicho de los juegos en móviles.
Según cifras de Google Play, el 40% de las aplicaciones descargadas son juegos, pero estas son flor de un día. ¿Recuerda a Angry Birds, Candy Crush o Farm Ville?, populares pero que perdieron fuerza con el tiempo.
Nintendo le apuesta a los celulares para tomar espacio en el dispositivo más personal de los usuarios.
Mientras usted caza pokemons , Nintendo pretende atraparlo a usted.