Cada vez se reconoce más la necesidad de facilitar las aplicaciones de negocio en la web a los vendedores, ejecutivos, gerentes y clientes. ¿Pero hay que comprar soluciones para sustituir el software actual, reescribirlos completamente, o aprovecharlos y migrarlos a la nube?
La respuesta depende de una diversidad de factores que van desde los objetivos del negocio, los costos de esas opciones, la factibilidad de hacer la migración y de la urgencia de llevar a la nube una parte o la aplicación completa.
La migración de un software a la nube consiste en tomar el sistema en su tecnología actual y, mediante una mezcla de procesos automatizados y manuales, crear una versión moderna de este, con igual funcionalidad y en plataformas que de forma natural corren en la web.
“El migrar a la nube no necesariamente es la decisión correcta en todos los casos”, advirtió Óscar Emo, CEO de Freeway. “La estrategia debe partir del análisis de los objetivos de negocio y del departamento de tecnología, contrastados con los factores financieros. Es posible que en ciertos casos la estrategia correcta sea no migrar”.
Entre los factores a contrastar se encuentran el costo total de operación (TCO) y la recuperación de la inversión (ROI). Localmente firmas como Freeway, Mobilize Costa Rica (antes ArtinSoft) y GBM brindan asesoría a las compañías para modernizar sus aplicaciones.
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El paso al cloud computing está imponiéndose en la industria.
International Data Corp. (IDC), firma de estudios del mercado tecnológico, publicó la semana anterior un reporte en el que proyecta que el total del gasto en infraestructura de tecnología de información para del despliegue de servicios en la nube aumentará un 25% en el 2016, alcanzando los $32.800 millones.
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Haga números
A muchas empresas les interesa aprovechar los sistemas que tienen y ofrecerlos en la web.
Lo que tienen en la actualidad normalmente son aplicaciones cliente-servidor o de escritorio que no pueden utilizarse en un móvil o en una tableta ni instalarse en la nube debido a su arquitectura. Cuando se tiene una nueva versión hay que ir de computadora en computadora.
La migración facilita que a las aplicaciones se les pueda dar una arquitectura web para poder hospedarlas en servidores de la compañía o de un proveedor. También facilita mover una parte al móvil.
Otra ventaja es que permite conservar las modificaciones, reglas de negocios y funciones introducidas al software original y que nadie recuerda. La actualización es en forma centralizada.
Por lo general, las empresas ganan en tiempo (la migración es más rápida que reescribir un software o instalar uno nuevo) y en inversión.
La migración cuesta entre un 25% y un 35% del gasto en una nueva solución o que reescribir el software , dijo Federido Zoufaly, director de Mobilize Costa Rica.
La transformación o migración de las aplicaciones corporativas debe hacerse para llevar a la nube los sistemas que sí aportan valor al ayudar a incrementar los ingresos y a reducir los costos. Según Emo, podrían usarse modelos híbridos con soluciones legadas (que ya no generan valor) y otras de servicios o en la nube.
Por ejemplo, se puede llevar a la nube los servidores y las bases de datos (bajo el modelo de Infraestructura como Servicio o IaaS, por sus siglas en inglés).
También se pueden mantener soluciones instaladas o legadas de procesamiento ( back office ) y llevar a la nube como Software as a Service (SaaS) los sistemas que se requieren para la operación de los colaboradores ( front office ) y de conexión con los clientes.
Otra opción es usar las plataformas en la nube (PaaS, por sus siglas en inglés) para desarrollar, ejecutar y gestionar aplicaciones, acelerar su desarrollo o transformar porciones para llevarlas a la nube.
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Cuándo hacerlo
Lo principal es tener claro que la migración no se debería usar en aplicaciones que no aportan valor al negocio o donde las empresas se ven obligadas a seguir dando mantenimiento al sistema.
Tampoco si la migración implica continuar con una tecnología obsoleta, cuyos costos aumentan cada día; ni cuando tiene el mismo o mayor costo y complejidad que un nuevo sistema.
En estos casos no quedaría más que sustituir el software existente con nuevas soluciones de cloud computing .
Hay también varios criterios que deben ser considerados.
“Trasladar un sistema a la nube sí es posible. Sin embargo, las ventajas no son tan amplias en comparación con las que obtiene una empresa que implementa una solución de negocio bajo el esquema de SaaS”, afirmó Francisco Montesinos, gerente de ventas de GBM Costa Rica.
La migración es factible dependiendo de diversas situaciones que enfrente la compañía.
Se puede aplicar la migración de un software si con ella se obtiene un servicio integral que opera con tecnología moderna; si es en soluciones con amplia cobertura y alto nivel de estabilidad; o si alarga la vida de un sistema para sustituirlo más adelante.
La combinación de aplicaciones legadas o migradas y de nuevos servicios en la nube se puede implementar si esto permite avanzar a servicios totalmente en la web; para incorporar sistemas o servicios que complementan a los antiguos programas informáticos; y para canalizar la inversión de la empresa hacia áreas que aportan valor al negocio.
En todo caso hay que considerar, todas las opciones (migrar, sustituir completamente por un nuevo sistema o desarrollar un servicio), sus costos, el tiempo para disponer las soluciones y, en especial, en cuáles procesos utilizar los servicios en la nube.
Guías informáticas a la nube
Feeway: Apoyo para definir estrategia, impacto y pasos para evolucionar a la nube. Ofrece soluciones de SalesForce (ventas y atencíón de clientes o CRM) y AppCloud (para construir aplicaciones en la Nube).
GBM: Ofrece soluciones de nube de SAP de gestión (ERP), nóminas, gestión de talento y de riesgo, análisis, y monitoreo de procesos de calidad y de negocios. También plataformas en sistemas operativos AS400, Unix, Linux, Solaris y Microsoft para desarrollo de servicios en la Nube.
Mobilize: Cuenta con soluciones para migrar o transformar sistemas, generar la arquitectura web y brindarlos en la nube y en móvil.
Fuente Empresas consultadas.