La oferta y la competencia se intensifican en la computación en la nube

Microsoft amplía servicios en la nube de su plataforma Azure para sectores de finanzas, manufactura, salud y comercio al detalle

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Tras los años de dudas en si avanzaban o no desde software instalados (on premise) a servicios de computación en la nube, las empresas se decidieron paulatinamente por la migración debido a los menores costos, la capacidad para tener aplicaciones más rápidamente y la expansión de la banda ancha. La pandemia habría eliminado las últimas resistencias, debido a la necesidad de disponer de aplicaciones corporativas para el trabajo remoto.

La competencia también está haciendo su parte. Las grandes firmas internacionales incrementaron la ofensiva, como los casos de Amazon Web Services (AWS), Google Cloud y Microsoft Azure.

La primera viene expandiendo sus sedes de comercialización e incluso anunció el 25 de febrero la apertura de su oficina regional en Costa Rica; la segunda despliega servicios incluso en segmentos de emprendedores; y la tercera acaba de anunciar la ampliación y actualización de sus servicios para sectores de finanzas, manufactura, salud y el comercio minorista, que estarán disponibles a partir del 31 de marzo.

“Hemos acelerado nuestros esfuerzos de apoyar e innovar de manera conjunta con nuestros clientes y socios ahora y en el futuro”, dijo Tom McGuinness, vicepresidente corporativo de salud de Microsoft Corp.

La actualizaciones anunciadas por Microsoft permiten, a firmas de banca y finanzas, tener un perfil personalizado y fortalecer la conexión con los clientes, incorporar servicios más rápidamente, ofrecer a los clientes acceso sencillo a las herramientas de autoservicio e incrementar las interacciones y gestionar los riesgos.

A las empresas de manufactura les permite conectar a sus colaboradores, especialmente del áreas de gerencia y dirección, para incrementar la agilidad, gestión del talento (contratación, entrenamiento, actualización y retención), brindar atención y servicios a los clientes, sostener la cadena de suministro y mantener la innovación.

En salud se médicos y pacientes podrán programar y realizar sus citas virtuales mediante una funcionalidad especializada de su plataforma de videoconferencias Teams, disponer de la información necesaria, aumentar la interacción y la colaboración del equipo médico, simplificar y hacer más eficiente las visitas domiciliarias cuando sean necesaria y que las clínicas y hospitales aumenten sus capacidades y recursos de gestión de información y análisis para diagnóstico.

Al comercio, los servicios de Microsoft Azure también permitirían generar demanda de productos mediante campañas de mercadeo digital, personalizar la venta en línea, digitalizar las operaciones y las tareas del personal de las tiendas físicas, disponer de la información de productos y clientes a través de los distintos canales (omnicanalidad) y facilitar la conversión y las compras, analizar la conductas de los clientes y gestionar el inventario, entre otras.

En general la industria se enfoca en un mercado que parece destinado a una mayor expansión. Gartner estima que en el 2021 el mercado mundial crecerá a $362.263 millones, especialmente en aplicaciones corporativas, plataformas (que se utilizan para el desarrollo de las aplicaciones) e infraestructura (que incluye almacenamiento de datos).

Las oportunidades para las firmas son muy amplias, al punto que firmas como Hewlett Packard separó sus divisiones de servicios y equipos hace varios años e IBM inició en octubre anterior un proceso similar de creación de una empresa enfocada en servicios de nube híbrida (incluyendo soluciones de inteligencia artificial) y de infraestructura.

¿Se acabaron las resistencias?

Después del periodo de sistemas basados en el modelo de cliente-servidor (donde la computadora se conecta a un servidor para usar las aplicaciones), los software de oficina impulsaron la utilización de sistemas on premise, que tenían el inconveniente de altos costos de licencia, actualización, soporte y disponibilidad.

El paso a la computación en la nube se inició con algunos servicios (como los correos electrónicos), pero las empresas de todos los sectores mantuvieron sus reservas para migrar sus sistemas gerenciales (bases de datos, contabilidad y finanzas, recursos humanos, aplicaciones de operaciones) a la Nube.

Algunas firmas como AWS iniciaron ofreciendo sus plataformas a nivel de startups, lo que apoyó el crecimiento de los servicios de streaming (como Netflix) y otras empresas disruptivas, de la mano de la expansión de las aplicaciones móviles, de la banda ancha (fija y móvil) y de los teléfonos, televisores y otros dispositivos conectados a Internet.

Lo mismo pasó con la comercialización de la tecnologías de inteligencia artificial. Por ejemplo, IBM apostó por expandir su tecnología de inteligencia cognitiva Watson, que tiene altos requerimientos de procesamiento, mediante servicios en la Nube.

La evolución, sin embargo, era lenta. Hasta la pandemia, cuando las empresas se dieron cuenta que era necesario que sus colaboradores utilizaran las aplicaciones corporativas desde sus hogares, dado que las conexiones privadas y las alternativas de escritorios virtuales no son suficientemente eficientes, no son simples y tienen mayor costo para instalar y utilizar. Muchas empresas ni siquiera usaban plataformas para videoconferencias.

McGuinness, de Microsoft, lo resalta en el campo de salud, por ejemplo, donde los profesionales, clínicas y hospitales debieron desplegar servicios de atención virtual, debido al confinamiento y a las dudas de las personas para exponerse.

La firma Studio Graphene publicó un informe en el cual se mostraba que casi la mitad de las empresas en el Reino Unido, por ejemplo, estaban preparada para la transición al trabajo remoto e incluso cuatro de cada 10 carecían de alguna tecnología que se lo permitiera. El 48% tuvo que invertir en nuevos programas informáticos y el 72% en equipos e infraestructura.

La falta de preparación se evidenció en sectores como comercio detallista y en el de logística. “Las interrupciones causadas por la pandemia dejaron al descubierto muchas lagunas en las operaciones logísticas. Los líderes de la cadena de suministro ahora se esfuerzan por revisar los procesos para gestionar los trastornos”, dijo Judith Magyar, directora senior del equipo de comunicación de contenidos de SAP.

Vuelco

La reacción tuvo que ser inmediata en todos los sectores. Primero para reactivar operaciones en los primeros días de confinamiento hace un año. Luego para desarrollar los aplicativos que se necesitaban ante la extensión de las medidas sanitarias. Ahora para responder a los cambios de hábitos de los consumidores, que por el momento siguen evitando ir a tiendas y pasan menos tiempo en ellas cuando acuden a un comercio.

En el sector detallista también se tuvo que dar un vuelco a servicios y ventas en línea, tanto con tiendas en línea propias y en centros comerciales virtuales (marketplace) como a través de las aplicaciones de servicios de entregas (delivery).

Las plataformas permitieron la expansión de nuevos modelos de negocios, como las llamadas cocinas ocultas, restaurantes donde no hay espacio para mesas ni comensales, los pedidos son en línea y las entregas mediante express o delivery.

En la manufactura, el trabajo remoto se concentró en las áreas gerenciales, incluyendo posiciones administrativas, de recursos humanos, de comercialización y de servicios. Aquí la adopción de la Nube se enfocó en la necesidad de mantener la operación de estas funciones indispensables para la producción, así como en la logística de insumos desde los proveedores y de productos hacia los clientes.

Durante la pandemia, este sector debió avanzar en la creación de cadenas de suministros más resilientes, en nuevas formas de relación con los clientes, en la transformación de su fuerza laboral y de sus mecanismos de innovación y entrega de bienes y servicios, y en cómo transformarse hacia una fábrica más ágil.

En el sector financiero y de servicios la ventaja la tuvieron las firmas que ya habían avanzado en la digitalización de sus procesos y en la disponibilidad de mecanismos de autoservicio para ahorro, préstamos y tarjetas, pagos e inversiones, entre otros muchos. A nivel global, muchas entidades identificaron que eso no era suficiente e implementaron mecanismos de conversación virtual de sus asesores y representantes con los clientes.

La industria espera que, ya más convencida de los atributos y beneficios de la tecnología y de los servicios en la nube, la digitalización y la migración al cloud computing mantenga el ritmo. “Como todos sabemos, la jornada más allá de la pandemia de Covid-19 apenas ha comenzado”, dijo Shelley Bransten, vicepresidenta corporativa de las industrias de comercio minorista y bienes de consumo de Microsoft.

En manufactura está claro que las fábricas requieren más agilidad y flexibilidad para cumplir con productos de más calidad, ciclos de producción más cortos e innovación. Aparte de las áreas comerciales, se requiere avanzar en la utilización de Internet de las cosas (IoT) para apoyar una mayor digitalización y automatización de la producción de bienes. Esto obliga a utilizar aplicaciones que permitan la generación y análisis de la información. Pero hay una dificultad.

“La mayoría de los datos industriales se generan fuera de los sistemas de tecnología de información, en operaciones de fabricación, cadenas de suministro o productos conectados”, advirtió Manish Chawla, director general del área de manufactura de IBM.

IBM se alió con Siemens y se apoya en desarrollos de su empresa Red Hat para ofrecer servicios de nube híbrida, encargándose de la gestión de las plataformas y aplicaciones de IoT, para abarcar todo el ciclo de fabricación.

Oracle, por su parte, ofrece su solución Oracle Fusion Cloud Human Capital Management (HCM) para que las empresas e instituciones del sector realicen la gestión de talento, mejoren la experiencia de sus colaboradores al utilizar los sistemas internos (incluyendo finanzas y gestión de la cadena de suministros) y puedan atender a los pacientes.

La firma destacó que HCM permitió a unos cinco centros hospitalarios de Estados Unidos atender a más de 26 millones de personas durante diciembre de 2020 y enero de 2021.

En logística las soluciones en la nube —como SAP Integrated Business Planning for Supply Chain— ayudan a mejorar las capacidades de planificación y previsión, a la transparencia de los datos (al integrar ventas y operaciones) y a enfocar a los colaboradores en la entrega de los pedidos.