
En este 2015, los retos que se avecinan para quienes estamos en el área empresarial son más que desafiantes y para sortearlos se requerirá tener los ojos muy abiertos y contar con varias habilidades para sobrevivir en la jungla darwiniana de los negocios actuales, donde se trata de comer o ser comido.
Entre los retos y las habilidades necesarias para salir airoso están:
El mercado cambia cada vez más rápidamente. La era del conocimiento ya llegó y no sabemos hacia donde nos dirige. En el mundo actual quién no planea con flexibilidad, planea el fracaso. La planificación debe contar con niveles de adaptabilidad, el mercado cambia cuestión de semanas y días. El gerente debe tener planes de contingencia ante las eventualidades negativas más probables, junto con sus consecuencias. Administrar mentalmente posibles escenarios es lo más prudente.
Exceso de información al alcance de un clic. Se debe estar informado, pero hay que tener cuidado de no tratar de seguirle el paso al huracán de información que se genera minuto a minuto. Contar con la capacidad de identificar unos cuatro medios de información que filtren esa avalancha de información le permitirá estar informado, no perder tiempo valioso y enfocarse en las actividades críticas de su gestión.
Muchas tareas y funciones. El gerente actual debe aplicar el principio de Paretto y enfocarse en ese 20% de las actividades que le generan el 80% de sus resultados. Debe contar con la capacidad de discernir e identificar esas actividades críticas que tienen prioridad dentro de la jornada laboral, para dedicar después el resto del tiempo a las actividades secundarias que no son vitales para la gestión. Consejo: mida el tiempo promedio que le lleva realizar dichas tareas habitualmente.
La innovación como arma de doble filo. El mundo actual crea nuevos mercados que hace unos cuantos años ni imaginaríamos, millonarios que se hacen en internet en pocos meses, industrias de turismo espacial, comercio electrónico, drones e inteligencia artificial en casi todos los nuevos productos que salen al mercado, alta conectividad a internet entre los consumidores, cambios en los hábitos de compra del consumidor, y esto por mencionar tan sólo algunas innovaciones de los últimos años. El gerente sabe que la innovación en procesos, productos, mercadotécnica y gestión administrativa son vitales para que la empresa no perezca. El gerente actual destina un porcentaje importante de su tiempo pensando en cómo agregar valor a la propuesta de la empresa. La innovación en la organización es un factor determinante para la competitividad empresarial. Ya no se puede hablar de la famosa frase "Aquí siempre hemos hecho las cosas así". Para impulsar la innovación en la empresa se aceptan las colaboraciones y nuevas ideas de terceros.
Las crisis tienden a reproducirse como las amebas. Conocer de economía es importante para el gerente actual y más en la economía globalizada, donde lo que sucede hoy en Tokio, mañana afecta Wall Street y el resto del mundo, en cuestión de horas. No se debe ser un erudito en economía, pero sí debe entender cómo las tasas de interés, inflación, desempleo, tipo de cambio, impuestos y el consumo del mercado afectará la estrategia de su empresa.
El nuevo coach. Las nuevas generaciones de profesionales son más difíciles de motivar que en el pasado. Un gerente que cuenta con un equipo de trabajo que lo aprecia por su calidad humana y trato, tiene altas probabilidades de ser más productivo que un equipo de trabajo dirigido con el látigo. Ese estilo de liderazgo autoritario y militar del siglo pasado ya no calza en el entorno actual. Ahora más que nunca se requiere de gerentes facilitadores para su equipo, que cuidan la imagen que proyectan.
El gerente del 2015 debe estar dispuesto a asumir el reto de gestionar los riesgos más que limitarse a aceptarlos. Nadie dijo que fuera fácil, pero es la realidad en la nueva economía de la incertidumbre que hoy rige los negocios y el mundo.