
Comunidades de la zona norte y Guanacaste resultaron ser las más afectadas por el paso del huracán Otto, sin embargo, este tipo de fenómenos se han ensañado históricamente con la región más pobre del país: la Brunca.
Con la llegada de Otto al país el pasado jueves 24 de noviembre, Costa Rica contabiliza cuatro huracanes que han impactado el territorio nacional desde 1988.
En 1988 fue el turno del huracán Juana, seguido de César (1996) y Mitch (1998).
¿Cuáles han sido las regiones más afectadas históricamente por huracanes?
Las regiones Atlántica y Pacífico Central son algunas de las que han sufrido los embates de estos fenómenos. Eso sí, con afectaciones intermitentes en sus cantones.
Una región como la Huetar Norte, por ejemplo, solo se vio afectada durante el paso de Mitch y, ahora, Otto.
Golpe tras golpe
Por esa razón, EF se dio a la tarea de realizar un análisis para determinar cuál es la región que más veces se ha encontrado en situación de emergencia por el efecto de los huracanes.
El resultado obtenido reveló que la región Brunca –también conocida como zona sur o Pacífico sur– es la más azotada por este tipo de desastres naturales.
Esta región sobresale como la única zona del país que reportó afectaciones en todos los cantones que la componen, en cada uno de los huracanes mencionados.
La región está conformada por los cantones de Pérez Zeledón, Buenos Aires, Osa, Golfito, Corredores y Coto Brus.
Con base en reportes de las autoridades, las regiones afectadas difieren entre un huracán y otro. Al punto que, en algunos casos, hay regiones que no formaron parte del listado de zonas afectadas en cada evento.
Werner Stolz, jefe de Pronósticos del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), confirmó que la región Brunca ha sido la única que registró efectos negativos en los últimos cuatro huracanes.
Esto se explica por la acumulación de las lluvias y el viento en la cordillera de Talamanca que funciona como pared natural del huracán, lo que finalmente provoca que el fenómeno se descargue sobre la zona sur del país.
El efecto se repite a pesar de que la ruta de los huracanes no tiene al Pacífico sur de Costa Rica en la mira.
Y es que, como si fuera poco la coincidencia en afectaciones históricas, se trata de una región que sobresale por ser la más pobre del país, de acuerdo con los ingresos de los hogares.
Al mismo tiempo, se trata de la zona que tiene el empleo informal más alto de Costa Rica.
La región Brunca lidera la producción nacional de cultivos de piña, palma y café.
Es claro que todavía no se tienen datos certeros sobre la afectación total en esa región.
Empero, sus seis cantones y 85 comunidades estuvieron en alerta roja la semana anterior por el paso del huracán Otto.
Desde el 17 de noviembre anterior –antes de la llegada de Otto– la Comisión Nacional de Emergencias atendió 29 comunidades afectadas por inundaciones en Golfito, Osa y Corredores.
La más pobre
Como se dijo, la región Brunca es la zona más pobre del país.
Para la última medición de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho, julio 2016), un 31,2% de los hogares que integran la región se encontraban en situación de pobreza por línea de ingresos.
Se trata de unos 124.026 costarricenses en esa condición.
La cifra significa casi 11 puntos porcentuales por encima del porcentaje de hogares pobres a nivel nacional.
La misma encuesta señala que un 12% de las personas de la región se encontraban en situación de extrema pobreza.
Si se analizan los datos por Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), la región Brunca mantiene una pobreza intermedia, pues el indicador mostró una incidenia de 25,4%.
La cifra está casi 6 puntos porcentuales por encima del impacto de la región Central.
En esta región, la dimensión que contribuye en mayor medida a la pobreza multidimensional es la vivienda y uso de Internet (1,81%), seguido por el acceso a la salud (1,63%).
El panorama en la zona sur coincide con las conclusiones de un informe publicado por el Banco Mundial, el 14 de noviembre.
El estudio detalla que los pobres tienen más probabilidades de residir en viviendas frágiles, ubicadas en zonas propensas a desastres naturales.
Además, trabajan en sectores altamente vulnerables a fenómenos climáticos extremos, como la agricultura.
La publicación evidenció las presiones económicas que este tipo de zonas sufren a causa de fenómenos naturales.
En Guatemala, por ejemplo, la tormenta Stan incrementó la probabilidad de trabajo infantil en más de un 7%, en los lugares afectados directamente.
Para América Latina y el Caribe, el estudio señala que las pérdidas provocadas por desastres naturales en esta región alcanzan $84.000 millones por año.
En algunos países de Centroamérica, la pobreza de las poblaciones afectadas por huracanes llegó a subir hasta en un 14%.

La región Brunca presenta también el ingreso promedio por hogar más bajo en el 2016.
Mientras la región Central reportó ingresos por hogar de ¢1.204.882, la Brunca registró ingresos por un valor de ¢686.401.
Esa cifra significa un 56% de diferencia entre los ingresos reportados entre ambas regiones.
Aunado a ello, la desigualdad en ingresos también se hace presente. Es la segunda más alta de las seis regiones del país, con un valor de 0,529, solo por debajo de la Huetar Caribe (el valor de 1 denota mayor desigualdad).
Tal concentración en los ingresos creció en 0,004 puntos en comparación con un año antes.
En tanto, la desigualdad en la distribución de los ingresos per cápita entre los habitantes, para 2016, se estimó en 0,521 puntos a nivel nacional.
Ligado al tema de ingresos, EF reportó en julio anterior, con base en un análisis efectuado con datos de la Encuesta Continua de Empleo (ECE), que la región Brunca agrupa la mayor cantidad de trabajadores informales del país, con un 57% del total de la población ocupada de la zona.
Se trata entonces de una fuerza de trabajo que mayoritariamente gana menos del salario mínimo , dedicada a la agricultura y sin estudios concluidos.
Líder en piña, café y palma
Asimismo, esta región lidera en al menos tres de los 10 principales productos de mayor importancia, por Valor Bruto de Producción (VBP), para el sector agropecuario nacional. Se trata de la piña, el café y la palma.
Buenos Aires encabeza la lista de los mayores cantones productores de piña en el país, desde la década de 1970.
Históricamente se ha ubicado entre el primero y el segundo lugar de privilegio en ese cultivo.
De acuerdo con información de los censos agrícolas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), para el 2014, el cantón reportaba 7.101 hectáreas dedicadas a ese cultivo.
En otras palabras, un 20% del total del área cultivable en Buenos Aires se destina a la siembra de uno de los principales cultivos de exportación costarricense.
En tanto, el cantón número 19 de la provincia de San José y localizado en la región Brunca, Pérez Zeledón, así como Coto Brus, se caracterizan por liderar en el cultivo del café de forma histórica.
En el caso de Pérez Zeledón, un total de 12.522 hectáreas cultivadas con el grano de oro, le ubican como el principal cantón productor para el 2014.
Y si de hablar de líderes se trata, Corredores sale al paso como el amo y señor en la siembra de palma en todo el país.
En el 2014, ocupó la primera posición como cantón productor con casi un 80% de su área sembrable destinada al cultivo y la producción de palma.
El huracán Otto provocó inundaciones y afectación en fincas productoras ubicadas en esas zonas del país, aunque los datos certeros se conocerán en los próximos días.
Los cuatro que han impactado
Huracán Otto
Fecha de afectación: Nov. de 2016
Daños estimado: No cuantificado
Fallecidos: 8 (al viernes 25 de noviembre).
Histórico. Desde que se tienen registros, nunca un huracán había tocado tierra tan al sur en Centroamérica. Es el primer fenómeno que recorre toda la línea fronteriza entre Costa Rica y Nicaragua. Su paso devastó cantones como Upala, Guatuso y Bagaces, donde dejó muerte y cuantiosos daños en infraestructura. El miércoles anterior 41 cantones del Pacífico central, sur y norte; el Caribe y la zona norte estaban en alerta roja.
Huracán Mitch
Fecha de afectación: : Oct. de 1998
Daños estimado: $92 millones
Fallecidos: 6
Mortífero. Sus efectos se prolongaron entre el 21 de octubre y el 4 de noviembre de 1998. De ruta variable, Mitch tuvo fuertes efectos en Centroamérica, especialmente en Honduras. Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos, se trató del huracán más mortífero observado en la región desde 1780: se registraron más de 11.000 muertes (6.500 de ellas en Honduras). Seis decesos en Costa Rica, según agencias.
Huracán César
Fecha de afectación: Jul. de 1996
Daños estimado: ¢184.477 millones
Fallecidos: 34
Destructor. César fue el huracán con mayores efectos negativos sobre Costa Rica, entre los tres fenómenos analizados. Esto pese a llevar una trayectoria similar a la que siguieron Juana y Otto. Fue la tercera tormenta en recibir nombre en la temporada de huracanes del Atlántico de 1996. Se formó a finales de julio de ese año en el mar Caribe y azotó con fuerza a Centroamérica, donde dejó 13 muertos en El Salvador, 11 en Colombia y 9 en Nicaragua.
Huracán Juana
Fecha de afectación: Oct. de 1988
Daños estimados: ¢129.958 millones
Fallecidos: 27
Benevolente. Juana fue el más benevolente con el territorio costarricense. Sin embargo, los daños en infraestructura y vivienda, sin contar al sector agropecuario, se estimaron en más de ¢7.000 millones (unos ¢129.958 millones, en colones del 2016). En Limón se ordenó el desalojo del hospital Tony Facio y se produjo el cierre del puerto. Causó extensas inundaciones y más de 200 muertes en Centroamérica.
Fuente: Archivo GN y agencias de noticias.