Las iniciativas privadas no pueden hacer milagros sin el apoyo y trabajo de las instituciones públicas para mejorar las condiciones de la capital, estas son las responsables de muchos de los planes y programas que podrían cambiar radicalmente el rostro y la dinámica de la ciudad.
Opinión
Opinión de Adriana Rodríguez | “Instituciones del estado, fideicomisos, empresas privadas o municipalidades se borraron como emisores de deuda bonificada”.
La clave no reside en la confrontación entre tecnología y humanidad, sino en la articulación de una complementariedad estratégica que potencie lo mejor de ambos mundos.