Una España cada vez más pobre, sumergida en fuertes conflictos sociales y con reducidas posibilidades de maniobra.
Así ven el futuro, a corto y mediano plazo, del país europeo el economista Mario Hidalgo y el relacionista internacional Alejandro Barahona, convocados por EF para evaluar la situación de España, en el marco de las medidas de austeridad anunciadas por el presidente Mariano Rajoy.
Entre esas medidas destacan un aumento del impuesto al valor agregado (IVA), que pasará de un 18% a un 21% y una disminución en los salarios y los días de vacaciones de los empleados públicos.
Hidalgo y Barahona prevén una profundización de la crisis española a nivel político, social y económico al menos por los próximos dos años. Además, opinan que Costa Rica será impactada en áreas como la cooperación, el turismo y el comercio.
¿Cuáles son las raíces de la crisis española?
Mario Hidalgo (M.H.): A nivel general, es el déficit en cuenta corriente, producto de que el Gobierno no desarrolló una política económica de cara a la crisis. Además, existen otros factores como la fuga de capitales, la ausencia de ahorro, los altos gastos del sector estatal y la gran dependencia del petróleo.
Alejandro Barahona (A.B.): Otro elemento básico fue el auge inmobiliario, producido en buena parte porque las entidades financieras le dieron crédito a personas que no tenían la capacidad de pago necesaria.
Cuando iniciaron los problemas en España, por ahí del 2008, ya la crisis inmobiliaria en Estados Unidos había explotado; o sea, España tuvo tiempo de reacción, ¿por qué no se actuó?
A.B.: Sin duda, España tuvo su posibilidad de actuar durante la administración de José Luis Rodríguez Zapatero, pero los partidos socialistas no están acostumbrados a tomar las políticas económicas más audaces; es decir, ese no era el fuerte de Zapatero. Además, el ambiente en Europa fue muy despectivo ante la crisis norteamericana, se tomó un espíritu de “a nosotros eso no nos va a tocar”.
M.H.: Lo que pasa también es que Zapatero, como gobernante, tenía la opción de mantener el auge inmobiliario que se veía venir o preocuparse por la crisis y sucede que el auge en ese momento implicaba generar empleos y dinamismo, entonces apostó por aprovecharlo.
Entre el paquete de medidas anunciadas por Rajoy está un aumento de impuestos, ¿qué implicaciones tiene ese incremento para una economía en recesión como la española?
M.H.: Los efectos dependerán mucho de la contracción que tenga el mercado interno y sobre todo de cómo vaya a gastar el Estado esos nuevos recursos que va a recoger mediante la vía de los impuestos.
“Recordemos, además, que el impacto no es solo la subida de impuestos, sino que el usuario tendrá que comprar 425 medicamentos que antes le daba el sistema de salud, los gastos en educación se van a incrementar cerca de un 66% y además se van a producir muchos cambios en el nivel laboral, especialmente en el sector público; es decir, usted suma todo lo que se le está juntando a España y se da cuenta de que el deterioro en el ingreso de la población va a ser altísimo, va a ser brutal”.
¿Qué impacto a nivel social tendrán las medidas propuestas por Rajoy?
A.B.: Hay que hablar de un incremento de la pobreza, pobreza que va a impactar hasta a los sectores más educados.
“Además, se va a dar un empobrecimiento del empleo, relacionado no solo con la reducción de los ingresos, sino con el aumento en el estrés y en la incertidumbre.
“También la crisis está generando problemas de legitimidad terribles, algunos datos indican que cerca del 70% de los españoles no cree en la institucionalidad pública.
“Además, se van a incrementar las ya alarmantes cifras de desempleo, que rondan el 25% a nivel general y el 50% entre la población joven, situación que promoverá la emigración, la fuga de cerebros.
“Finalmente, esos jóvenes desempleados no se van a casar, ni van a querer tener hijos; es decir, se va a complicar aún más el problema demográfico europeo.”
¿Qué cuota de la crisis están pagando los grandes capitales?
A.B.: Dentro de las medidas anunciadas por Rajoy, no se les toca para nada, algo totalmente distinto a lo que está haciendo el presidente francés, François Hollande, que fue a los primeros que les pasó la factura.
M.H.: Además, esos sectores permanecen dentro de la amnistía fiscal; es decir, no pagan nada por la parte de responsabilidad que tienen de la crisis.
¿Cómo evalúan la solicitud de rescate para el sector bancario de un máximo 100.000 millones de euros realizada por Rajoy?
M.H.: Siempre y cuando esos dineros se destinen al gasto, van a ayudar a la reactivación, pero si se destinan al ahorro o a los salarios de ejecutivos, no van a tener ningún impacto.
A.B.: Mucha de la idea de ese rescate es tratar de intervenir en el momento oportuno para evitar un impacto mayor en otros sistemas de la zona.
“Además, recordemos que es una transferencia directa a los bancos; o sea, los bancos son los que se comprometen a regresar el dinero, eso para evitar un incremento en el déficit fiscal”.
¿Dónde sería recomendable invertir esos fondos?
M.H.: Una alternativa importante es la educación, porque el país se está descapitalizando, las personas que llegan a España son menos calificadas que las que se van, por lo tanto hay una pérdida neta y eso es muy peligroso porque con esa tendencia a cinco años no vas a tener profesionales.
“Otra posibilidad es el sector de turismo, porque se ha convertido en la locomotora interna de España”.
¿Qué otros elementos impiden que España vuelva a caminar?
M.H.: Como España es parte de la Unión Europea (U.E.), pues se tienen que dar un conjunto de hechos entre varios países para que todos puedan salir de la crisis a mediano plazo, por ejemplo si los problemas franceses e italianos se agudizan, ahí la crisis española se extiende.
A.B.: Algo importante es que uno no ve a Rajoy con medidas dirigidas a la reactivación, sino a la austeridad.
¿Por qué es tan importante España para Alemania?
A.B.: Porque la economía española tiene un peso grande en la zona euro y además en España hay muchas inversiones alemanas, también porque la canciller, Angela Merkel, necesita que Rajoy sea su aliado.
M.H.: Además, la gran preocupación de los alemanes, aunque no lo pueden decir públicamente, es que su sociedad es muy disciplinada en los gastos, en contraposición de países como Grecia y España. Merkel lo que busca es que los otros países se ordenen, porque los alemanes ya se están cansando de pagar la crisis.
¿Qué efectos tendrá la profundización de la crisis sobre Costa Rica?
A.B.: A nivel comercial hay una alternativa que puede beneficiar al país, sería que el español se refugie en lo básico, en lo que vende Latinoamérica, commodities , eso sería bueno por la entrada en vigencia del Acuerdo de Asociación con la U.E.
M.H.: Sin embargo, cabe la posibilidad de que el consumo se reduzca drásticamente e impacte a nuestras exportaciones, lo que sí es un hecho es que el Acuerdo de Asociación ya no va a ser el salvavidas que se esperaba. Es exactamente lo que pasó con el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (Cafta), se aprueba y llega la crisis.
A.B.: Otro efecto importante va a ser a nivel de becas, porque buena parte de ellas, especialmente las de más nivel académico, se imparten en España por una cuetión idiomática y esas becas sin duda están amenazadas.
“Además, en el nivel de cooperación la U.E. es muy importante para el país y recordemos que Costa Rica es un país de renta media y la política que se está generando en Europa con esta crisis es de sacar la cooperación de países de renta media.
M.H.: Finalmente, creo que es importante agregar que, a nivel turístico, España es uno de los países europeos de donde nos visitan más personas y la lógica es que con una reducción en la capacidad del gasto el turismo es de los primeros rubros que se recortan, entonces es predecible que nos visiten menos españoles.
En síntesis, ¿cómo evalúan el futuro a corto y mediano plazo de España?
M.H.: La crisis continúa mínimo hasta el 2014 y se profundiza aún más, dependiendo de lo que hagan los vecinos de España, hay grandes riesgos sociales como la emigración de personal calificado y el envejecimiento.
“Queda por definir hacia dónde se van a orientar los recursos del rescate, eso también definirá en gran medida si España sale o no de la crisis.
A.B.: Es una situación muy compleja que provocará reacciones sociales muy importantes, porque pareciera que cuando Rajoy tomó sus decisiones estaba con el consejo económico, pero se olvidó del social.
“Por otro lado, la imagen de España se está viendo muy afectada, así como su estabilidad institucional y mi gran duda es si estas últimas medidas van a ser suficiente.”
M.H.: Yo creo que van a tener que seguir aumentando el IVA.
A.B.: Esa es una opción, pero dependerá en buena parte de la reacción social que tenga la gente, porque al gobierno se le puede acabar el oxígeno y ahí si va a tener que meterle mano a los grandes capitales.
“Además, existe la posibilidad de que otros países europeos necesiten rescates y eso complicaría todo.
M.H.: Lo que sucede, en síntesis, es que en España ya se tomaron las decisiones económicas, pero faltan las sociales y las políticas. La crisis no es solo económica.
Principales medidas de Rajoy
Impuestos: El impuesto al valor agregado normal pasará de un 18% a un 21% y el reducido de un 8% a un 10%. Además, aumentarán entre otros los impuestos al tabaco, a la energía y a las sociedades.
Mercado laboral: Se reducirán las prestaciones por desempleo de un 60% a un 50%, se eliminarán bonificaciones, se presentará un nuevo proyecto de ley sobre el sistema de pensiones, se suprimirá la paga extra de navidad y se reducirán el número de días libres.
Otras medidas: Se disminuirá en un 30% el número de concejales, se reducirá el presupuesto ministerial en 600 millones de euros, se recortará en un 20% la subvención destinada a partidos políticos, sindicatos y organizaciones empresariales, se eliminarán empresas públicas y el gobierno hará un recorte de 7.000 millones de euros en materia de salud, por lo que dejará de financiar 425 medicamentos.
Fuente Medios internacionales.